La Sanidad en la comarca del Caudal está en el punto de mira. Al menos de los miembros de la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública del Área VII, que ayer mostró su preocupación por la situación de este servicio en el valle del Caudal. Los portavoces del colectivo denunciaron el mal estado de las instalaciones sanitarias en varios puntos de la comarca y criticaron la fusión con el área del valle del Nalón.

Pablo Ramírez, uno de los portavoces de la plataforma, señaló que "la red de ambulatorios sufre desde hace ya bastantes años un deterioro constante, que parece no tener fin". En este sentido, citó los centros de salud de La Cuadriella en Turón, Collanzo en Aller o Pola de Lena, cuyas instalaciones, apuntó "no reúnen las mínimas condiciones sanitarias". "Llevamos años con protestas ciudadanas, recogidas de firmas, y otras acciones que solo han cosechado promesas y más promesas que nunca se llegaron a cumplir", valoró el portavoz de la Plataforma, que advirtió de que "la degradación aumenta". "Mieres- Norte también lleva años y años, pendiente de una remodelación que nunca acaba de materializarse", denunció Ramírez.

La situación de las instalaciones también fue objeto de crítica por parte de la Agrupación Vecinal de Mieres, cuyos responsables calificaban hace unos días de "hospitalillo de campaña de Burundi" al centro de salud de La Cuadriella, en Turón. De hecho, los vecinos elaboraron un informe detallando las graves deficiencias del inmueble, comenzando por la carencia de alumbrado exterior y contenedores para depositar la basura, y censurando los daños en los accesos, con las sueltas y actualmente precintadas.

En su informe, también señalaban otros desperfectos, como que el cuadro general de luces está a la vista de todo el público y que las luces de emergencia no funcionan. Alertan además de que los maletines de urgencias, contenedores de agujas y demás material, se encuentran al alcance de cualquiera. Los vecinos criticaron la falta de sala de curas, ni de paradas, ni sala independiente para maniobras de urgencia, y que los pacientes deben de ser reanimados en la sala de espera.

Sin embargo, la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública del Área VII no solo pone el foco en las instalaciones, sino que también se preocupada por el servicio. "Las listas de espera siguen siendo excesivas lo que atenta contra la salud y calidad de vida de las personas empujando a quienes pueden pagárselo, aunque sea a base de sacrificios, hacia la sanidad privada", criticó Pablo Ramírez, que alertó de que "cada vez es más frecuente la derivación de pruebas médicas y enfermos desde la Sanidad Pública a hospitales, laboratorios y clínicas privadas. Con la salud de las personas, con el dinero público se favorecen negocios privados".

El portavoz del colectivo también se pronunció respecto a la unificación de servicios con el área sanitaria del Nalón, y que desde algunos frentes se ha catalogado como fusión de áreas. "Desde la Plataforma no somos contrarios a la racionalización de los recursos, pero creemos que debemos ser muy cuidadosos con lo que se hace; estudiarlo bien, discutirlo con los ayuntamientos, sindicatos, organizaciones sociales y usuarios antes de tomar una decisión".

Sin embargo, a juicio de Ramírez, "este no parece ser el camino emprendido por la Administración ya que se habla de la derivación de unos 3.000 pacientes desde el Álvarez-Buylla al Valle del Nalón para los servicios oftalmológicos". "Creemos que esta no es la mejor manera de racionalizar nada, lo único que se va a conseguir es descapitalizar el hospital de Mieres, causar trastornos a los pacientes para unas pruebas relativamente sencillas que el hospital está suficientemente capacitado para hacer y, como en tantos otros temas, favorecer los negocios privados". En esa línea, recordó que el área del Caudal "es un área muy extensa, no es sólo Mieres, sino que enviar a un paciente de Felechosa o Puente de los Fierros al Nalón para graduarse la vista no parece la mejor manera de racionalizar".

La Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública del Área VII ha solicitado una reunión con la gerencia para tratar estas demandas, así como la tardanza en cubrir bajas médicas y la descapitalización de personal del área del Caudal.