El mercado invernal se cerró ayer sin que el Caudal haya podido concretar alguna de las muchas negociaciones que mantuvo. Al cuadro mierense aún le queda una bala en la recámara y es la de los jugadores pertenecientes a la Asociación Española de Futbolistas (AFE) que tras el cierre de esta ventana de fichajes se encuentren sin equipo, y a los que se puede incorporar en cualquier momento. Y es que los blanquinegros necesitan reforzarse al contar sólo con diecinueve futbolistas.

Los teléfonos de las oficinas del club han trabajado de lo lindo en las últimas semanas pero sin éxito. El Caudal afrontaba el mercado invernal con la intención de reforzarse pero sale de él debilitado. Debilitado no sólo cuantitativamente sino cualitativamente pues se han ido jugadores importantes como Súper y Braulio además del complemento Beto sin que se produjera más llegada que la del joven extremo sudafricano Maponya. El club pretendía la llegada de un delantero centro y de un central contrastados pero no ha podido cerrar ninguna de las vías que mantenía abiertas.

Para el ataque Borja Navarro y Chus Hevia eran los preferidos. El primero no firmó tras una negociación en la que llegó a haber un principio de acuerdo pero, finalmente, el gijonés apuesta por la vía asiática. El caso del ovetense es parecido aunque el ex del Cartagena, al cierre de esta edición, estaba a un paso del Logroñés. Para la zaga Gallardo recaló en el Palencia y Gotor al fútbol indonesio pero es que además el Caudal negoció con el central del Covadonga Negredo sin llegar a un acuerdo. Ahora el club estudiará los jugadores sin equipo pues como marca la norma "el jugador profesional cuyo contrato ha vencido antes en las ventanas de fichajes, podrá inscribirse fuera de dicho período".