"Los guajes de mi barrio jugábamos al fútbol en la calle y no teníamos más remedio que pasar la pelota al dueño, aunque jugase mal, para que no terminase el partido". Esta anécdota, narrada por el artista felguerino José Luis Iglesias Luelmo, hizo estallar en carcajadas al numeroso público que acudió al homenaje a los protagonistas del fútbol del valle del Nalón de los años 50 y 60. El acto estuvo organizado por el Ateneo-Casino de La Felguera, y contó con la colaboración de LA NUEVA ESPAÑA de las Cuencas.

Iglesias Luelmo fue el alma máter de la iniciativa y autor de las metopas, con el correspondiente dibujo a lápiz que se entregó a cada uno de los agasajados. Jesús Agustín Menéndez "Tinín", presidente del colectivo organizador, hizo un emotivo repaso de los equipos de la época. Entre ellos, nombró a "el Saeta, el Rayo, el Mestalla, el Águila La Nava, Les Pieces, el Alcázar, la Cruz Blanca, el Santo Tomás o el Unión Popular de Langreo" y tuvo una mención especial para "el Honved de Lada", al tiempo que destacó, divertido, como "los de Lada tuvieron la idea de ponerle el mismo nombre a su equipo que al Honved de Budapest en el que brillaba Puskas como máximo goleador".

La sorpresa de la tarde vino con la emisión de la película "Once pares de botas", protagonizada por el actor asturiano José Suárez. "Vino muchos años a pasear por La Felguera durante las fiestas de San Pedro", explicó Jesús A. Menéndez "Tinín". En el filme aparecen grandes estrellas del fútbol del momento, como Samitier, Ramallets, Di Stefano, Zarra o Molowny.

Llegado el momento de los homenajes, tomó la palabra el periodista y colaborador de LA NUEVA ESPAÑA, Carlos Cuesta. Él fue el encargado de recoger el galardón para su fallecido padre, Faustino Cuesta "Calambres". El periodista recordó, emocionado, a su progenitor: "Un chaval que con apenas diecisiete años fue fichado para jugar en la liga cubana". Ante el público, trazó "la aventura casi novelesca de mi padre en Cuba, donde fue feliz, si bien tuvo que volver a España debido a una apendicitis". Del mismo modo, recordó que una vez recuperado, "Calambres" fue jugador del Rácing de Sama, del Sporting de Gijón y, sobre todo, inolvidable presidente del Titánico de Laviana.

Otro de los homenajeados fue Ricardo Fuente "Calo" que además del reconocimiento de los organizadores, fue agasajado por el Ayuntamiento de Langreo con una placa que le entregó el alcalde Jesús Sánchez Antuña, en la que se hace constar "nuestra gratitud por la gran labor llevada a cabo favor de los chavales y por su dedicación al fútbol base de Langreo".

Nico, Nosti, Vicente Villamil y Tinín también gozaron de su correspondiente reconocimiento y como no podía ser de otro modo, especialmente brillante fue el momento en el que Cholo Juvacho, "Cholín el Piringüelu" recogió su distinción bajo los acordes de "Bendita Felguera". Cholo regaló a los asistentes algunas anécdotas de su paso por distintos equipos asturianos y rememoró con especial cariño un partido "contra el Salamanca que habíamos ganado aquí por tres a cero, pero allí nos pusieron a jugar en un campo de tierra dura donde no se clavaban los tacos y además jugamos a las tres y media de la tarde en pleno mes de julio". "Nos metieron seis goles, pero bien podían haber sido doce", exclamó Juvacho con esa retranca tan suya antes de arrancarse con un par de chistes que pusieron el colofón a una jornada única de fútbol y nostalgia a partes iguales.