La juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Langreo ha decretado esta mañana el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, de la mujer acusada de apuñalar a tres hombres y una mujer en las inmediaciones de una discoteca situada en La Felguera. La supuesta agresora se acogió a su derecho a no declarar y será conducida al centro penitenciario de Asturias, según aseguró el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA).
La presunta agresora, que pasó a disposición judicial esta mañana, fue trasladada desde la Comisaría de la Policía Nacional de Langreo-San Martín del Rey Aurelio al juzgado de guardia de Langreo para prestar declaración. V. M. R. fue detenida en la madrugada del pasado domingo por un delito de lesiones. Dos de los heridos permanecen en estado grave en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA).
La noche había transcurrido tranquila, sin sobresaltos, en el barrio La Pomar de La Felguera. Pero ya bien entrada la madrugada, en torno a las cinco, un grupo de jóvenes (la mayoría treintañeros) iniciaron un enfrentamiento verbal en una discoteca del barrio. Ya fuera del local, tras ser advertidos por el personal del establecimiento, se enzarzaron en una pelea física. En un momento determinado, y sin mediar palabra, una mujer sacó un arma blanca y apuñaló a cuatro personas: una chica y tres hombres. La agresora es V. M. R.: una conocida de la Policía Nacional en el concejo, con antecedentes penales, que está detenida por un delito de lesiones. Había sido expulsada ya a las tres de la mañana de un local de ocio "por su conflictividad". Dos de los heridos permanecen en estado grave en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA).
Los agentes de la Policía Nacional y los sanitarios registraron el aviso sobre la pelea poco antes de las seis de la mañana. Cuando llegaron encontraron a dos hombres tendidos en el suelo, sangrando por el tórax y heridos de gravedad, y una mujer muy alterada. También a un grupo de jóvenes desorientados que, en ese momento, ofrecieron testimonios deshilados. Los agentes esclarecen ya entonces que, al menos, hay siete personas involucradas en la pelea. Entre ellas, V. M. R. y su novio, además de un amigo de la pareja. También las otras cuatro personas que resultaron heridas. Todo indica que los dos grupos no habían tenido ningún roce hasta ayer.
La Policía Nacional trabaja en la investigación mientras los sanitarios asisten a los dos heridos. Son B. C. A. y W. F. M. Ambos tienen puñaladas en el tórax. El que presenta un peor estado ha recibido dos "pinchazos". El otro fue apuñalado en seis ocasiones, aunque "presenta heridas más superficiales", confirman los sanitarios ya tras la primera atención en el barrio de La Pomar.
Suenan las sirenas. Los dos hombres son trasladados al Hospital Valle del Nalón. Allí están atendiendo ya a los otros dos heridos por arma blanca en la pelea, un chico y una chica. Se han trasladado hasta el centro sanitario en un coche, confirman fuentes oficiales. Son atendidos y dados de alta, sus heridas son muy superficiales: "Tenían cortes porque intentaron arrebatar el arma a la agresora", explicaron fuentes de la investigación.
Sin el arma
Ese arma complica las pesquisas. En el lugar de los hechos, los agentes no consiguen recuperar el "objeto punzante" con el que V. M. R. hirió a los hombres que están hospitalizados. Por la tarde tampoco la tienen localizada, aunque los agentes esperan recuperarla antes de culminar la redacción del informe sobre la reyerta. La mujer no está herida, pero su novio sí. Según declara ante los agentes, ha recibido varios golpes en la pelea.
La investigación sigue abierta pero, por el momento, sólo está detenida V. M. R. Las declaraciones de los implicados en la pelea serán cruciales para decidir el camino que seguirán las diligencias en los próximos días. También la evolución de los heridos que, al cierre de esta edición, seguían en estado grave y hospitalizados en el HUCA. Por el momento, la mujer ha sido arrestada por un delito de lesiones. Los cargos podrían variar durante las próximas horas, con el avance de la investigación.
Los agentes de la Policía Nacional terminaron las diligencias a primera hora de la mañana, para que V. M. R. pasase a disposición judicial. "Quedan testimonios por recoger, aún es pronto para hablar", señalaron desde el cuerpo nacional de Policía. Silencio, igual que el que ayer al mediodía había en la calle de La Pomar. Una calle desierta, apenas dos parroquianos viendo el fútbol en una cafetería y una tranquilidad sin huellas de lo que había ocurrido de madrugada.
