"Gracias a la labor de esta empresa en el concejo, son muchos los restaurantes que gozan de llenar sus mesas, y gran parte de los hoteles pueden colgar el cartel de 'completo' por un tiempo". Este es un extracto de la carta de Verónica Sánchez, una joven hostelera de Lena que ayer acudió al Ayuntamiento para respaldar una propuesta de vecinos, comerciantes y hosteleros: que las administraciones hagan todo lo posible por agilizar los permisos y la empresa Asla (Asturiana de Laminados) pueda ampliar su nave en el polígono de Villallana. Una actuación que generaría ochenta puestos de trabajo, a sumar a los más de cien que ya están en marcha.

El problema está en que la área no está urbanizada y los trámites para la actuación marchan, aunque no sin obstáculos: hay un informe de secretaría del Ayuntamiento que informa de que el procedimiento actual no es el adecuado. Posición que motivó el voto en contra de PSOE y abstención de Compromisu por Lena en el último pleno. El gobierno local (IU) mantiene que están actuando conforme a la regularidad y tiene el apoyo del PP. Ahora, 1.175 vecinos han presentado sus firmas para que Asla crezca en el concejo.

"El PSOE no quería que la propuesta saliera de este Ayuntamiento. De hecho, saben que hay un informe de la CUOTA (Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio del Principado de Asturias) en el que se legitima la tramitación", afirmó la alcaldesa, Gema Álvarez, durante el encuentro con los vecinos y trabajadores de Asla que ayer acudieron al Ayuntamiento. Fue más allá y afirmó que "también tenemos el visto bueno de intervención".

La empresa, por si acaso, ya está tomando medidas. Hace unos días, anunció que estaba negociando la compra de terrenos en el concejo de Mieres. Y el movimiento vecinal, hostelero y comercial del municipio ha respondido en el acto.

La empresa quiere quedarse. De hecho, los trabajadores acudieron ayer al salón de plenos para respaldar la propuesta vecinal. Mariel Fernández, portavoz de la plantilla, explicó ayer que "lo ideal sería poder ampliar aquí". "Ahora que nos hemos asentado, sería una faena tener que deslocalizar parte de la producción", añadió. Y es que la línea que ya está en marcha seguiría en las parcelas de Villallana, por lo que la logística de Asla se vería afectada. Los trabajadores ya habían hecho público un comunicado en el que reclamaban a todas las fuerzas políticas su "unión" para conseguir la urbanización de Asla lo antes posible.

"Lo que no podemos hacer es querer llegar a la Alcaldía a toda costa, aún fastidiando puestos de trabajo en el concejo", señaló Ramón Marinero, portavoz del PP. Sin nombrar, pero aludiendo sin duda al PSOE, afirmó que "hay que abandonar la política de altos vuelos y hacer las cosas bien en el Ayuntamiento, igual que se hizo en su día con este polígono". El área industrial de Villallana empezó a funcionar sin urbanizar y con dos empresas asentadas, tramitación que tuvo lugar en el último mandato socialista: "Cuando llegamos, las dos empresas (son Asla y Rioglass) estaban construidas en huertas de particulares", añadió la Alcaldesa.

Venta de terrenos

Los terrenos son ahora del Ayuntamiento. Y la venta de las nuevas parcelas para Asla, según Álvarez, supondría un ingreso de más de medio millón de euros para el Ayuntamiento. "Perder ese dinero sería ya una de las consecuencias nefastas si este proyecto no sale adelante", afirmó Marinero.

Las otras consecuencias las expuso Verónica Sánchez: "Muchos de los restaurantes de la Pola llenan cada día con los trabajadores de Asla", afirmó. Para Roberto Fernández González, vecino del municipio, "conseguir la ampliación nos pondría en el mapa". "Estaríamos hablando ya de un tejido industrial fuerte, al reforzar a una empresa que ya es pionera en su sector", añadió.