La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Aparecen quince cabras muertas en un arroyo en La Moral

Los vecinos reclaman desde el miércoles la retirada de los animales, en avanzado estado de descomposición

Mónica Mateos muestra algunos de los restos de las cabras muertas en el arroyo La Riega, en La Moral. F. RODRÍGUEZ

Los vecinos de La Moral, en Langreo, llevan esperando desde el pasado miércoles la retirada de varias cabras muertas, quince según sus cálculos, que fueron arrojadas al cauce del arroyo de La Riega y que "están provocando un problema de insalubridad y malos olores". Así lo denunció la alcaldesa de pueblo de La Moral, Mónica Mateos, que espera que los animales muertos puedan ser retirados a lo largo de la jornada de hoy.

Mateos indicó que la situación ya fue denunciada el miércoles, cuando un vecino alertó de la presencia de los animales por el mal olor que desprendían. "No sabemos cuánto tiempo pueden llevar allí. En la zona había huellas de un remolque, así que lo más seguro es que los arrojaran así al arroyo. Se trata de un cauce que desemboca en el Candín y que suministra agua a algunas fuentes y pasa por varias fincas en las que beben animales; por eso no entendemos que no se hayan tomado medidas de control en todos estos días", aseveró.

La alcaldesa de pueblo detalló que las cabras muertas "unas quince entre crías y ejemplares adultos según lo que hemos podido ver, están en estado de descomposición y ya se puede ver que tienen gusanos". Los hechos fueron denunciados el mismo miércoles, sin que "nos hayan dado desde entonces ninguna solución". "Llamé a todo el mundo. El Ayuntamiento decía que la empresa que recoge los animales muertos no podía acceder a esa zona y el Seprona todavía no ha pasado por aquí", indicó, para añadir: "El Ayuntamiento nos han mandado hoy (por ayer) una pala para llegar a la zona y esperamos que este sábado puedan llevárselas".

Compartir el artículo

stats