A pesar de que la nieve se suele convertir en uno de los atractivos turísticos de las comarcas mineras para la Semana Santa, buena parte de los alojamientos no han visto resentidas sus reservas por el cierre anticipado de las estaciones. El buen tiempo ha permitido que el valle de Pajares, el Angliru o el parque de Redes, tengan buena parte de sus establecimientos al cien por ciento de reservas para esta Semana Santa. Los hosteleros explican que el turismo blanco ha dejado paso este puente festivo al turismo verde.
El responsable de la asociación Asturcentral, Luis Núñez, señaló que tiene sus alojamientos llenos. "Me consta que hay más hosteleros que están como yo; la gente quiere disfrutar de la naturaleza de las comarcas mineras", señala Núñez, que explica que el perfil del turista ya no es el del esquiador, sino un visitante más familiar y con afición por el senderismo o el montañismo. "Al final hemos conseguido salvar la temporada de invierno y ahora este otro turismo más ligado a la naturaleza será el que predomine los próximos meses", indicó.
En esa misma tesitura están en el parque de Redes. La propietaria del albergue "El Cantu'l oso", Sandra Fernández, expone que "lo tenemos lleno en Semana Santa, y ya tenemos reservas para el resto de abril, mayo y junio". La hostelera señala que Redes supone un gran atractivo para el turismo natural, y que "las reservas que tentemos nosotros, además, vienen ya de lejos".
En Riosa, el Angliru es un imán de visitantes. El hotel "El Mirador del Angliru", ubicado en mitad de la mítica subida, también va a poder hacer su particular agosto en Semana Santa. "Tenemos completo todo", señala José Ángel Calvo, su gestor. Además, este año, en el que la Vuelta a España retornará a la cima riosana, el atractivo es todavía mayor. "Esperamos tener un muy buen año", argumenta Calvo.
De hecho, los fines de semana de julio y agosto ya tienen bastante reservas. "Es verdad que se está moviendo todo bastante", indica. El perfil, como en Redes o Pajares, también es de visitantes vinculados al montañismo y a las rutas senderistas. "Puede venir alguna pareja, pero lo normal son familias o grupos de montañeros", finaliza Calvo.
