Los embalses de Tanes, Rioseco y Alfilorios, que dan de beber prácticamente a todo el centro de Asturias, se encuentran en pleno proceso de llenado primaveral y ya están casi al 80 por ciento de su capacidad. Tras un invierno relativamente flojo en cuanto a precipitaciones, la primavera ha continuado en la misma tónica, si bien algunas lluvias intermitentes han ido ayudando a llenar los pantanos, que se encuentran recibiendo el agua del último y definitivo deshielo del año. De esta forma, parece que el abastecimiento de la zona centro estará asegurado sin problemas ni restricciones.
El complejo formado por los embalses de Tanes y Rioseco tienen una capacidad máxima de 37,55 hectómetros cúbicos de agua. Es decir, algo así como 37 estadios y medio de grandes dimensiones, tipo Santiago Bernabéu o Camp Nou. A 10 abril ambos embalses sumaban 32,84 hectómetros cúbicos almacenados, lo que representa el 87,45 por ciento justo de su capacidad. Tanes (en Caso) y Rioseco (Sobrescobio), gestionados por Cadasa (Consorcio para el Abastecimiento de Agua y Saneamiento en el Principado de Asturias) son la principal fuente de agua de Asturias. Respecto al año pasado, por estas mismas fechas, contienen algo menos de agua, pero no demasiada, ya que estaban al 90 por ciento. Por su parte, el pantano de los Alfilorios (Morcín) da agua a Oviedo. Aquí la situación no es tan boyante como en los embalses del parque natural de Redes, pero aún hay agua en abundancia. De sus 8,16 hectómetros cúbicos de capacidad, Alfilorios contiene 5,01, lo que representa el 61,42%. Se trata, con todo, de una instalación que puede llenarse más rápidamente con varios días de lluvias seguidos. Respecto al año pasado, la situación de Alfilorios es bastante peor, ya que a finales de abril de 2016 estaba prácticamente lleno, al 97%. Si se suman los tres embalses de abastecimiento de agua, cuentan con 37,85 hectómetros cúbicos, o lo que es lo mismo, el 79,4% por ciento de su capacidad de almacenamiento.
La situación en Asturias es bastante positiva. En la vecina provincia de León, la situación es más difícil. Se llegó a barajar la posibilidad de tramitar la declaración de sequía, pero desde diciembre los pantanos se han ido llenando muy poco a poco. Barrios de Luna está al 58,7%, Riaño al 58,3 y el Porma al 57,7 por ciento de su capacidad.
Por otra parte, la Confederación Hidrográfica del Norte también informa del estado en el que se encuentran los ríos de la zona. En Nalón, a la altura de El Cañal, en El Condao (Laviana) tenía una profundidad de 77 centímetros a día 15 de abril.
A su paso por Sama, el Nalón contaba con un profundidad de 40 centímetros. Cambiando de río, en este caso el Caudal, en Argame, tenía 1,31 metros de profundidad. Todas ellas son situaciones consideradas "normales" por la entidad que gestiona los cauces fluviales del norte de España, si bien son cantidades más reducidas que las registradas en semanas pasadas.
