Los trabajadores de la factoría que Thyssenkrupp Airport Systems, dedicada a las pasarelas de aeropuerto o "fingers", tiene en el polígono industrial de Baíña (Mieres), han alcanzado un acuerdo para el convenio colectivo y abandonan las movilizaciones que iniciaron hace unas semanas. El acuerdo supone incrementos en la paga de beneficios, la prima de producción, el complemento de las pagas extras, mejoras sociales y una subida salarial, entre otras medidas. José Manuel Cima, presidente del comité de empresa por CC OO, destacó que estos beneficios "se encuentran dentro de los objetivos que tenemos marcados dentro del sindicato" y se mostró satisfecho con este acuerdo que han respaldado los trabajadores de la factoría en asamblea.
El principal escollo de las negociaciones era la subida salarial y la participación en los beneficios de la empresa. En cuanto a lo primero, el acuerdo es de un incremento del 1% correspondiente al año pasado, un 1,2% para el presente ejercicio y un 1,3% para 2018. En cuanto a los beneficios, se modificará con un incremento con respecto a las anteriores condiciones. Sobre la prima de producción, en el convenio anterior se realizaba por secciones con grandes diferencias entre unos trabajadores y otros. Esta situación cambia ahora para que las diferencias se acorten en algunos casos y se igualen en otros. También subirá el complemento de pagas extras.
El convenio también incluye 45 ascensos entre categorías y niveles profesionales, que también se verán reflejados en el salario de la plantilla. Asimismo, se ha alcanzado el compromiso para firmar catorce contratos indefinidos con la intención de consolidar el empleo dentro de la compañía. Otro aspecto destacado son las diversas mejoras sociales que se han logrado, así como la ampliación en diez días de la jornada de verano, que acabará el 10 de septiembre. Esto último aspecto afecta a los trabajadores de las oficinas en la planta.
El acuerdo entre trabajadores y empresa supone el fin de las movilizaciones que se habían convocado desde el comité de empresa para forzar el convenio. La plantilla llegó a secundar varios paros parciales y uno de veinticuatro horas; y había convocado un nuevo calendario de movilizaciones que se iba a alargar hasta mediados de este mes.
No es la primera vez que los trabajadores de Thyssenkrupp Airport Systems, con una plantilla de alrededor de 300 trabajadores en la factoría de Baíña, se movilizan, aunque por causas distintas. Hace dos años, la multinacional valoró la venta de esta factoría con la intención de abandonar el negocio de las pasarelas de aeropuerto, lo que motivó el temor de los empleados a perder su puesto de trabajo o ver modificadas sus condiciones laborales. Finalmente, Thyssen renunció.
