Disgusto para la novia a cuatro días de la boda. Le robaron 4.700 euros, de regalos de invitados y del sueldo de su prometido, que había dejado en un sobre dentro de su coche en el aparcamiento de un supermercado en El Masgaín (Pola de Lena). No había cámaras y, aunque ha presentado la denuncia, ve casi imposible recuperar su dinero: "Si mi familia no llega a apoyarme, no podría casarme este sábado", lamentó la novia, que prefiere mantener el anonimato para no "incomodar" a sus invitados.

Ocurrió el martes, durante una jornada que pintaba feliz para la chica. Fue con una amiga a Pola de Lena para pagar al fotógrafo y su plan era seguir con los preparativos y pagos durante la tarde. Pero antes, ella y su amiga se detuvieron para hacer la compra de la semana. "Dejé el sobre con cuidado en la guantera, había varios coches aparcados y gente por el parking, pero no vimos nada que nos llamara la atención", explicó.

Cerraron el coche con el control remoto de la llave. Las dos mujeres están seguras. Cuando volvieron, ya con la compra, la puerta del piloto estaba abierta y el sobre había desaparecido: "En ese momento llamamos a la Guardia Civil, se personó una patrulla, pero no nos dieron esperanzas", afirmó la novia. Los agentes les dijeron que todo indica que alguien la vio guardar el sobre: "Claro, lo guardaste con tanto cariño que se fijaron y les entró curiosidad", le espetaron los agentes, según la joven. En cuanto ellas fueron a comprar, el ladrón accedió al vehículo y se llevó el sobre.

Un botín nada despreciable: 4.700 euros. "Estoy muy disgustada porque era dinero de regalos y de mi marido. Somos gente trabajadora, sabemos lo que cuesta ganar un sueldo y teníamos muchas ilusiones puestas en todos los preparativos de nuestra boda", señaló la joven. Una parte del convite aún estaba sin pagar y, si no fuera por la ayuda de la familia, tendrían que suspenderlo y arreglárselas para devolver los regalos: "Nos han hecho una faena muy grande, a mí y a toda mi familia, espero que no tengan la conciencia tranquila. Nos dejaron a cero".

Le queda el consuelo de que "aún hay gente buena en el mundo". En el supermercado se preocuparon por lo ocurrido, pero nada pudieron hacer. Según explicó la joven, "sólo tienen cámaras de seguridad a la entrada y la salida del aparcamiento. El coche estaba aparcado a la entrada del supermercado, así que nadie ha visto nada". Teme que esta no fuera la primera vez que esa persona o personas actuaban en el lugar porque "parecían conocerlo bien". También le demostraron apoyo todos los que pasaron por el parking, pero nadie pudo hacer nada. Y su familia, que ha solucionado todo para que mañana se vista de blanco.