Una persiana nueva, a prueba de robos, cierra cada día un céntrico bazar chino de Pola de Lena. Nunca había hecho falta esa persiana. Hasta que, el pasado mes de abril alguien quemó el almacén de este bazar chino. Un local a escasos metros de distancia: no hubo daños personales, pero sí pérdidas materiales valoradas en 50.000 euros. "Tenemos miedo de que pase otra vez", dijo entonces el propietario de la tienda, un hombre asiático que lleva diez años en la Pola y se defiende en castellano. La Guardia Civil detuvo ayer a dos lenenses, uno de ellos menor de edad y con antecedentes, como presuntos autores de la quema. El Instituto Armado desvincula ahora lo ocurrido con otros incendios en bazares de Asturias (San Martín del Rey Aurelio y Oviedo). En la tienda de Pola de Lena, a pesar de los avances, no se respira tranquilidad: "Aún tenemos miedo, no sabemos todavía por qué nos han hecho esto", lamenta el hombre.

Es media tarde y el propietario del bazar está colocando las plantas. Tiene la cara sonriente, amable cuando alguien le pregunta. Igual que su mujer: "Nosotros no hemos tenido problemas nunca con los vecinos", afirma, encogiéndose de hombros. Ellos lo dicen, todos los que les conocen lo confirman. Tienen dos hijas que van a clase en un colegio de la Pola, la familia está completamente integrada. Fue un susto grande que les llamaran de madrugada, el 4 de abril, para decirles que alguien les estaba quemando su almacén. "Estaba en renta", dice, escueto, el propietario del bazar. Ahora tienen otro local, pero no da detalles por temor a perderlo. Aquella madrugada, veinticinco vecinos fueron desalojados ante el riesgo de que la quema se propagara: "Es que no vale con robar, es que además te queman tus cosas y asustan a los vecinos. No podemos entenderlo, no hay explicación", lamenta el comerciante.

La investigación ya tiene algunas respuestas. Tras un insondable trabajo, el equipo de investigación de la Guardia Civil de Pola de Lena llegó a la conclusión de que el incendio se había producido mientras se estaba perpetrando un robo en el interior del almacén. Además, se pudo situar a dos sospechosos en el incendio y vincularlos a unos objetos abandonados en las inmediaciones del bazar.

"No sé qué cosas dejaron fuera, no sé nada de eso", matiza el comerciante. Sólo sabe, a través de una notificación de la Guardia Civil, que los dos hombres han sido puestos a disposición judicial. A uno de ellos, al menor, le habían detenido antes por hurtar en otros establecimientos de la Pola y por robar con el método del "tirón" a varias mujeres: "Yo no conozco a nadie, yo a la gente joven no la conozco", insiste el propietario del bazar.

Está recogiendo las plantas, es casi la hora de cerrar. Desde la otra acera, una vecina ve al propietario del bazar: "Vaya alegría que me llevé hoy cuando supe que ya habían detenido a los que fueron, a los que les quemaron el local. Estos pobres, había gente que decía que habían provocado ellos el incendio en el local para cobrar no sé qué. Mentira", afirma, con cierta rabia. Las plantas ya están dentro, el dueño del bazar baja la persiana. Se asegura de que quede bien cerrada.