Tras haberse entregado ayer de forma voluntaria en la comisaría de Policía de Langreo, D. H. H., presunto autor de los disparos durante el tiroteo ocurrido en la madrugada del pasado domingo en un pub de La Felguera, pasó esta mañana a disposición judicial tras lo que ha sido decretado su ingreso en prisión. Su padre, D. H. P., que también se había entregado en la comisaría, quedó en libertad tras prestar declaración ante los agentes. Su hermano, J. R. H. H., que disfrutaba de un permiso carcelario y estaba ingresado en el Hospital Central al haber recibido un disparo accidental en el tiroteo, recibió el alta y fue trasladado al centro penitenciario de Villabona. Ambos quedan a disposición del juez para ser llamado a declarar como investigados en fechas próximas.

D. H. H. llegó esta mañana a los juzgados de Langreo escoltado por varios agentes. Algunos de sus familiares le esperaron a las puertas del edificio a la espera de la decisión judicial.

Tras una comparecencia de más de tres horas en el juzgado y de acuerdo con el Ministerio Fiscal, la jueza sustituta dictó una orden de prisión provisional, comunicada y sin fianza por tentativa de homicidio, tenencia ilícita de armas de fuego y conducción temeraria, según informó el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA). Posteriormete fue trasladado para su ingreso en prisión en el centro penitenciario de Asturias.

El tiroteo tuvo lugar sobre las 6.30 horas del domingo en un local de copas del barrio de La Pomar, en La Felguera, tras una disputa originada por causas que todavía no están claras. La víctima, A. H. H. y vecino de El Entrego, que se recupera en el Hospital Valle del Nalón, relató ayer a este diario que conocía a los atacantes, pero que "no había tenido ningún problema con ellos previamente; no entiendo por qué actuaron así". "Yo había ido a llevar a casa a un amigo que vive en el barrio de El Puente y por allí estaba la persona que después me disparó. Estaba agresivo y pegando tiros al aire".

La víctima expuso que, al volver a La Felguera, "como le conozco, hablé con él por teléfono para ver qué le pasaba y se puso a amenazarme". Según el relato de los hechos de la víctima. D. H. H. se presentó poco después en el bar y amenazó con el arma a la víctima. "No entiendo por qué reaccionó así porque no habíamos tenido ninguna disputa antes. Le dije que si tenía algún problema conmigo lo arreglábamos en la calle sin la herramienta (pistola)". Según fuentes de la investigación, algunas personas que había en el bar echaron a D. M. M., que poco después regresó acompañado por su padre y su hermano.

Los tres vecinos de Langreo golpearon al hombre y D. H. H. lo encañonó. Se efectuaron hasta cinco disparos. Á. H. H. recibió tres impactos en las piernas, el hermano del agresor sufrió un balazo accidental en el hombro y otro proyectil quedó alojado en las paredes del local. La víctima fue trasladada al Hospital Valle del Nalón en un coche particular por algunos amigos.

Se puso en marcha a partir de ese momento un intenso operativo policial que finalizó con el arresto de los tres sospechosos. J. R. H. H., que disfrutaba de un permiso carcelario cuando tuvieron lugar los hechos, acudió al HUCA para ser curado de la herida de bala, pero pidió el alta voluntaria. La Policía, que ya estaba tras su pista, le detuvo en la jornada del lunes y le condujo de nuevo al Hospital Central. El hombre estuvo en el módulo penitenciario del complejo sanitario y ya ha regresado a la prisión de Villabona tras recibir el alta.

Persecución

El cerco policial se estrechó sobre los otros dos presuntos agresores. Los agentes, que vigilaban los domicilios familiares en Langreo, localizaron en la mañana del lunes a los dos hombres, que se dieron a la fuga en coche. Comenzó entonces una persecución por la carretera de San Tirso, entre Langreo y Mieres. Sin embargo, los sospechosos lograron eludir a la Policía y huir. Finalmente, ante la intensa presión policial, decidieron entregarse en la jornada de ayer. La investigación apunta a que D. H. H., que cuenta con varios antecedentes policiales, fue el autor material de los disparos. Los agentes lograron hallar el arma de fuego utilizada en el tiroteo.

Los vecinos de Langreo mostraron el domingo su "inquietud" y "preocupación" por los últimos sucesos ocurridos en el barrio de La Pomar, la principal zona de "movida" nocturna de Langreo. Vicente Gutiérrez Solís, presidente de la Federación de Asociaciones del Vecinos de Langreo, demandó "más presencia policial, pero también más participación ciudadana", no sólo "por las agresiones que se están produciendo últimamente, sino también por los actos vandálicos que hay".