La empresa de cerveza artesanal Caleya ya produce en Langreo. La firma, que decidió trasladarse al polígono de Valnalón ante la imposibilidad de ampliar su actividad en Rioseco, prevé duplicar su producción anual hasta alcanzar los 200.000 litros a medio plazo. El cambio de emplazamiento también ha supuesto un aumento de la plantilla. Ahora la empresa cuenta con cuatro trabajadores, uno más de los que tenía, incluyendo a sus promotores. También ha crecido de forma significativa la superficie útil para elaborar la cerveza, desde los 100 metros cuadrados hasta los 700, aproximadamente.

Así lo explicó Silvestre Alonso, uno de los promotores de cerveza Caleya. "Llevamos produciendo y comercializando cerveza en la nueva ubicación del polígono de Valnalón desde el pasado mes de junio y de momento nos va bien. La idea es alcanzar las 200.000 litros al año e incluso crecer más en función de la demanda y de la capacidad productiva. El potencial de la nueva nave nos da margen para ello", argumentó Alonso. Este año Caleya prevé llegar a los 150.000 litros, ya que la producción estuvo paralizada durante unos dos meses como consecuencia del traslado: "El acondicionamiento de la nave de Valnalón llevó unos cinco meses, pero nuestra idea era planificarlo para dejar Rioseco y empezar a producir a continuación en Langreo. Finalmente no pudo ser y estuvimos un par de meses parados".

La firma de cerveza artesanal, que llevaba asentada en Rioseco desde hacía cinco años, decidió abandonar Sobrescobio y mudarse a Langreo ante la ausencia de suelo industrial en el concejo del Alto Nalón para ampliar su actividad. El crecimiento de Cerveza Caleya desde que inició su periplo ha sido exponencial. Comenzó su andadura con 20.000 litros, hasta llegar a los 90.000 del pasado ejercicio.

La falta de espacio y los complicados accesos fueron la principal razón que llevó a Caleya a valorar el cambio de ubicación. La instalación que ocupaba la firma en la zona de El Cuitu, en Sobrescobio, tenía una superficie de apenas 100 metros cuadrados, lo que impedía el crecimiento del negocio. "Ahora tenemos una superficie de 700 metros cuadrados, con lo que la capacidad productiva es mucho mayor. También hemos aumentado plantilla y contamos con cuatro personas en total". El polígono coyán de Comillera, ya urbanizado, no pudo ofertar suelo para ya que estaba reservado en su totalidad por los promotores de la planta embotelladora y del lagar del sidra, dos proyectos en proceso de revocación.