Los datos que ofrece Red Eléctrica Española (REE) son claros y tajantes. En el primer trimestre de 2017, -son las cifras más actualizadas que ofrece la empresa estatal-, en el Principado de Asturias se generaron con carbón un total de 2.560.878 Megavatios/hora (MWh), lo que supone el 67,8 por ciento de los 3.800.210 MWh producidos en la región. La mayor parte de esta producción energética no se realiza con mineral autóctono: se lleva a cabo con carbón procedente de otros países. En Asturias únicamente las térmicas de Soto de Ribera, La Pereda y Narcea usan carbón español. Otras grandes instalaciones, como Aboño o Lada, solo usan mineral importado.

En el mes de enero, Asturias generó con carbón un total de 1.209.585 MWh de electricidad. En total, sumando todas las tecnologías se produjeron 1.616.619 MWh. Eso supone que el mineral tuvo un peso en la producción del 74,82 por ciento, o lo que es lo mismo, tres cuartas partes de la electricidad que se consumió o salió de Asturias fue producida en las centrales térmicas de la región. Las siguientes fuentes de energía en el Principado fueron el ciclo combinado (123.398 MWh), la eólica (79.776 MWh), y ya fuera del podio, la hidráulica (76.642 MWh). En porcentajes sobre el peso de la energía producida, el gas apenas llegó al 7,63 por ciento del total, mientras que las dos renovables se quedaron en un 4,93 y un 4,74 por ciento respectivamente.

En el mes de febrero, la tendencia fue similar. El carbón llegó a producir 848.845 MWh de un total de 1.300.532 MWh, lo que supuso un 65,26 por ciento del total. Creció sin embargo el peso de la hidráulica, que se situó en el 11,81 por ciento del total (153.669 MWh). También ganó algo de peso la energía eólica, que generó 97.225 MWh, lo que supuso un 7,47 por ciento. Los que bajaron del segundo al cuarto puesto en febrero fueron los ciclos combinados, que se situaron en un 7,06 por ciento (91.839 MWh).

En marzo, último mes del que se disponen datos por comunidades autónomas, la generación total cayó por debajo del millón de MWh en Asturias, pero el carbón siguió ocupando un lugar prominente en el porcentaje de generación, logrando producir más de la mitad de la electricidad. Del total de los 883.058 MWh que se generaron el tercer mes del año, las térmicas asturianas generaron 502.448 MWh, lo que supone el 56,89 por ciento. La hidráulica y la eólica volvieron a crecer como segunda y tercera fuente respectivamente. La energía generada en las centrales hidroeléctricas (139.807 MWh) supuso un 15,83 por ciento del total. En el caso de los aerogeneradores, se llegó al 12,55 por ciento del total (110.881 MWh).

Los datos de Asturias son solo un reflejo de la tendencia general del país, donde la sequía ha hecho que el carbón vuelva a ganar un gran peso en el mix energético. El último informe de Red Eléctrica, correspondiente al mes de junio, establece que el mineral fue la tecnología con mayor peso en la generación eléctrica en España. De estas térmicas salieron el 20,6% de los gigavatios (GWh) consumidos en el país. Esto supuso que el carbón produjo más del doble de la energía que había producido en el año 2016.