La Policía Nacional ha detenido a una mujer de 60 años de edad, empleada de hogar, por hurtos en el interior de dos domicilios donde trabajaba. En un domicilio hurtó joyas y en el otro se llevó una pequeña caja de caudales con 10000 euros.

A finales del mes de octubre un ciudadano denunció la sustracción de una pequeña caja de caudales de su domicilio en la cual guardaba la cantidad de 10.000 euros. Agentes policiales del Grupo de Policía Científica, realizaron la oportuna Inspección Técnico Policial comprobando que la cerradura del domicilio en ningún caso había sido manipulada y descartando la fuerza como método de entrada, lo que indicaba la utilización de llave falsa o las propias del domicilio.

Realizada la oportuna investigación, se pudo comprobar que en el citado domicilio trabajaban como empleadas de hogar dos mujeres y hermanas. Tras una minuciosa labor, los investigadores pudieron comprobar como una de las hermanas también trabajaba en otro domicilio y que la misma mujer había realizado varias ventas de joyas. Como quiera que en la denuncia inicial no se habían sustraído ningún tipo de joyas ni objetos de valor, se contactó con la persona empleadora del segundo domicilio donde la ahora detenida ejercía su trabajo, la cual comentó a los agentes la falta de varias joyas de su domicilio y una vez mostradas las joyas empeñadas por la empleada de hogar las reconoció como las suyas.

La mujer empleada de hogar ha sido detenida acusada de los dos hechos delictivos. Una vez fue oída en declaración en Dependencias Policiales fue puesta en libertad.

La investigación ha sido llevada a cabo por agentes pertenecientes al Grupo Local de Policía Judicial de la Comisaría de Mieres. Las Diligencias Policiales practicadas han sido remitidas a la Autoridad Judicial.