El cierre de la térmica de Lada anunciado a finales de la semana pasada por Iberdrola va camino de convertirse en una guerra política. La presidenta del PP de Asturias, Mercedes Fernández, mostró ayer durante un acto en Mieres su más enérgico rechazo a los planes de la compañía vasca y señaló directamente al PSOE como uno de los culpables de que la caldera de la planta langreana y sus hornos se vayan a apagar definitivamente en unos cinco años. Fernández reclamó a los socialistas que "pidan perdón" a los asturianos por haber votado una moción en el Congreso para "anticipar muchísimos años el cierre" de este tipo de instalaciones.
La propuesta que se sometió a votación hace unas semanas en Madrid también fue apoyada por Unidos Podemos, Ciudadanos y Esquerra Republicana e instaba al Gobierno central a promover la clausura de estas instalaciones en 2020. Un horizonte mucho más cercano del que está proponiendo la Unión Europea para que la "descarbonización" del continente quede completada.
Sin embargo, ahora Iberdrola ha dado un paso más allá y ha planteado el cierre de todas sus plantas alimentadas con carbón de forma inmediata. Sin esperar a ver cómo terminan las discusiones políticas.
La líder de los populares asturianos aseguró que todo lo que perjudique a Asturias y suponga una merma de puestos de trabajo, riqueza y empleo para las comarcas mineras es "una mala noticia". La planta da trabajo a unos 90 trabajadores. Iberdrola ha prometido recolocar a toda la plantilla en otros centros de producción. Pero el impacto no será solo directo. El golpe del cierre llegará también a las auxiliares que, según algunas estimaciones, tienen en plantilla a unas 200 personas.
Fernández aseguró que va a tratar de "defender los intereses generales de Asturias y del carbón en la región". Se da la circunstancia que es ahora el Ministerio de Energía, dirigido por el popular Álvaro Nadal el que tiene que decidir si acepta o no el cierre de la planta de Lada. Aunque la dirigente asturiana del PP no aclaró si va a intermediar de alguna forma ante Madrid para evitar esta clausura. Aseguró que "nosotros estamos totalmente en contra del cierre de la central de Lada".
Lo que si hizo fue cargar con dureza contra el PSOE. Según señaló, estaba "bastante sorprendida" de ver ahora "cariacontecidos por el cierre que ellos quisieron, pidieron y votaron" a los dirigentes socialistas. En esa línea, aseguró que ayer vio a un Gobierno del Principado "absolutamente alborotado", mientras que sus compañeros en el partido le habían "dado la espalda a Asturias en el Congreso".
"En política hay que ser coherente", resaltó. Para, a continuación, destacar que el PP sí que tiene un compromiso real con el carbón. A su entender, el mineral aún no ha dicho su última palabra en el mapa de generación eléctrico español, y todavía debería de tener futuro durante los próximos años. Cabe destacar que la planta de Lada solo consumía carbón.
