La Guardia Civil ha confirmado que el conductor kamikaze que ayer causó un grave accidente de tráfico en la autovía A-66, entre Mieres y Ujo, dio positivo en el control de alcoholemia, aunque no en el de drogas. Así, ha sido imputado por un doble delito de alcoholemia y conducción temeraria. En concreto, el resultado de la prueba de alcohol arrojó un resultado de 0,76 miligramos de alcohol por litro de aire aspirado, lo que supera los 0.60 mg/l que fija la ley como límite para tomar acciones penales.

El accidente se produjo tras circular el kamikaze algo más de tres kilómetros en sentido contrario. Cogió la salida de Ujo en dirección a Mieres, pero lo hizo a través del carril de deceleración de entrada a la localidad. A partir de ahí transito por el carril en dirección a León hasta que a la altura de Santullano protagonizó la coalición con los vehículos que circulaban correctamente. El conductor ha quedado en libertad, pero con cargos y a la espera de ser requerido por el juez.

El accidente causado a última hora del miércoles se saldó con seis personas heridas de diversa consideración, cinco leves y una con pronóstico reservado. Y es que el kamikaze arrolló a tres vehículos que venía de frente. Según los datos facilitados por el Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) todos los heridos, cuatro hombres y dos mujeres, fueron traslados al Hospital Álvarez Buylla. El de mayor consideración es un varón de 27 años de edad que fue evacuado por el equipo médico de la UVI-móvil con pronóstico reservado, a expensas de más pruebas y hasta nueva valoración médica.