"Se terminaron por fin las fechas de cenas y comidas familiares y con amigos, así que toca ponerse las pilas y sobre todo hacer las cosas con cabeza". Así comenzó la dietista Patricia Jara Fernández su charla sobre "Cómo ponerse en forma después de los excesos navideños". La charla tuvo lugar en la Casa de Cultura "Alberto Vega" de La Felguera y se enmarca dentro de las actividades del Club de la Salud de LA NUEVA ESPAÑA, organizado por el Club LA NUEVA ESPAÑA de las Cuencas.

Jara Fernández es técnico superior en Nutrición y Dietética y lleva más de catorce años con consulta abierta en La Felguera, "intentando mejorar y reeducar los hábitos alimenticios de mis pacientes" tal y como aseguró durante su intervención. La ponente puso de manifiesto que durante las fechas navideñas se dan una serie de factores que facilitan el aumento de peso y la sensación de pesadez y hartazgo que suele aparecer una vez que se van los Reyes Magos. "Comemos en exceso y consumimos muchos alimentos hipercalóricos, pues no podemos olvidar que por ejemplo, cien gramos de turrón tienen más de 600 calorías. Además, se abusa del alcohol que no aporta más que calorías e hinchazón y se deja de lado el deporte y todo ello nos lleva a engordar y a sentirnos mal con nosotros mismos", enfatizó.

Para poner remedio a tales "males", la dietista abogó por iniciar un plan de vida y alimentación sana pero sin caer en las dietas sin sentido que "solo traerán un efecto rebote" y se mostró contraria a los ayunos prolongados "que nos deshidratan y provocan que al final tengamos más ansiedad por comer". Fernández compartió algunos trucos para empezar "cuanto antes" a rebajar los indeseables efectos de los excesos navideños: organizar las comidas semanalmente, hacer la compra después de comer y evitar los pasillos donde se encuentran los alimentos dulces, además de comer despacio, no picar entre horas, evitar las salsas y rebozados y utilizar siempre aceite de oliva.

"Es esencial hacer cinco comidas al día, dando mucha importancia al desayuno que ha de incluir fruta fresca, lácteos sin grasa y pan integral, galletas sin azúcar o repostería casera", destacó. También enfatizó la necesidad de consumir a media mañana "un puñado de arándanos, cuatro o cinco nueces o una infusión sin teína ni azúcar". Para la hora de la comida recomendó elegir el consumo de "verduras, bien cocinadas o en ensalada, pasta o arroz integral o legumbres estofadas, acompañándolo de carne o pescado a la plancha". "También es muy importante comer algo a media tarde, una fruta o fiambre sin grasa ni ingredientes añadidos y hacer una cena liviana con verduras, pescado blanco o tortilla a la que puede añadirse espárragos o champiñones", subrayó Fernández.

Por otro lado, la conferenciante puso de relieve la gran importancia de beber agua (un vaso de agua en ayunas y como poco litro y medio al día), evitar el café y el té y olvidarse de las bebidas azucaradas y el alcohol. Todo ello, ha de ir acompañado de práctica de ejercicio "de modo regular y constante, empezando poco a poco y con supervisión profesional" tal y como reclamó para finalizar.