El alcalde de Aller, David Moreno, y su antecesor en el cargo, Gabriel Pérez Villalta, afrontan hoy la primera jornada del juicio por el caso de la gestión del polideportivo de Sotiello, en el que se enfrentan a una acusación de un presunto delito de prevaricación continuada por el reparto de subvenciones a una asociación deportiva que ofrecía actividades deportivas en el equipamiento allerano. Poco antes de las 10 de la mañana, Moreno llegaba al Juzgado de lo Penal número 2 de Oviedo. "Estoy muy tranquilo porque después de cuatro años esperando voy a poder contar la verdad. Sigue jugándose a sembrar la duda, pero que todo el mudo sepa que no se nos está juzgando porque falte un solo euro en Aller, sino por un proceso administrativo que habrá que probar si se estaba haciendo correctamente", declaraba el regidor a su llegada. Diez días más tarde, habrá una segunda sesión, ya que hay un elevado número de testigos, entre los que se encuentran concejales de las Corporaciones en las que se aprobó y desarrollo la actividad en Sotiello.
El actual regidor allerano, que tuvo que dejar el PSOE al abrírsele juicio oral, aunque conservó la alcaldía como no adscrito, basará su defensa en un auto previo del Tribunal de Cuentas, que archivó la causa al entender que "no hubo menoscabo para las arcas municipales".
La causa vino originada por una denuncia del PP ante la Fiscalía de Asturias. El Ministerio Fiscal advirtió indicios de un posible delito y presentó denuncia. Una denuncia que tras ser archivada por el Tribunal de Cuentas siguió su curso en los juzgados de lo Penal. La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito continuado de prevaricación y solicita que se condene a cada uno de los acusados a 10 años de inhabilitación especial para empleo o cargo público y abono de las costas procesales.
