La Policía Local de Mieres detuvo a primera hora de la mañana de ayer a un hombre como presunto autor de los delitos de acoso sexual y robo con fuerza (violencia). Los hechos se produjeron en la calle Covadonga, en torno a las 7.30 horas, cuando el mierense intentó manosear y besar a una chica. Ésta le pidió que parara y él, tras el rechazo, le arrebató un equipo de música. Tras un forcejeo, la joven resultó herida leve y un testigo alertó a los agentes. Interceptaron al hombre, sólo unos minutos después, en las inmediaciones del campus de Barredo.

El suceso tuvo lugar en las inmediaciones de los locales de ocio de la calle Covadonga, una de las más concurridas durante las noches del fin de semana en Mieres. El detenido estaba en ese lugar, cuando increpó a la joven. Intentó besarla y toquetearla y ella se negó, según los testigos. Fue entonces cuando el hombre le arrebató un equipo de música que ella estaba sujetando. Era el material de un allegado de la chica, que había trabajado esa noche como DJ en un local nocturno de Mieres.

Fue entonces cuando hubo un forcejeo. El hombre corrió al coche, que tenía aparcado cerca del lugar, para huir. La chica intentó alcanzarlo y pararle para que no se lo pudiera llevar. Al cerrar la puerta delantera, una prenda de la chica quedó enganchada. El hombre arrancó el coche y la arrastró varios metros.

Atención sanitaria

La chica precisó atención sanitaria. Pero las heridas, según la investigación, no revestían gravedad. Un testigo de lo que había pasado, mientras tanto, fue a la comisaría de la Policía Local. Está a unos doscientos metros de distancia del lugar en el que habían ocurrido los hechos. La respuesta de los agentes fue rápida: interceptaron al hombre sólo unos minutos más tarde, en el entorno del campus de Barredo.

Fue detenido en el lugar y la Policía Local le practicó la prueba de alcoholemia. No pudieron someter al hombre a un test de drogas porque el Ayuntamiento carece del material necesario para este examen. Los agentes del Cuerpo municipal pusieron la denuncia en manos de la Policía Nacional, que instruye el caso y la investigación por los presuntos delitos de acoso sexual y robo con violencia. Está previsto que el hombre pase a disposición judicial el lunes.

Esta ha sido una semana marcada por los sucesos. En Pola de Lena se está investigando, a través del Equipo Mujer-Menor de la Guardia Civil, una presunta violación a una joven de unos veinte años. Una vecina de la Pola encontró a la chica, desorientada y en estado de shock, el domingo. La joven aseguró que había sido víctima de abusos sexuales pero, por el momento, no se ha podido identificar a los agresores. La chica está muy confusa y pudo haber sido drogada, explicó en la denuncia.