El subsecretario de Estado de Energía, Pablo García Manzano, reiteró ayer ante la comisión del ramo del Congreso de los Diputados que la intención del Gobierno es no poner fecha final para sacar al carbón del mix energético. "El carbón juega un papel en el mix y el Gobierno respalda todos los compromisos que ha adquirido, incluidos los tratados medioambientales internacionales", destacó.

El Gobierno respondía a una pregunta de la diputada canaria de Ciudadanos Melisa Rodríguez sobre los motivos por los que el Ejecutivo no se ha sumado al compromiso internacional para establecer una fecha límite del uso del carbón como fuente de producción energética. La diputada de Ciudadanos recordó que varios países de la Unión Europea se han comprometido a marcar una fecha para sacar al carbón de la producción energética mientras que España, según explicó, no está dispuesta a hacerlo. "El proceso de descarbonificación debe ser ordenado. En estos momentos estamos redactando la Ley de Transición Energética", de cuyo articulado y ordenación del mix energético dependerá el futuro del carbón. En cualquier caso, el subsecretario recalcó que "no está en el ánimo del Gobierno cerrar fuentes de energía" y reiteró que la seguridad de suministro, el abaratamiento de los precios y el respeto al medio ambiente son las tres variables que contempla el Ministerio para mantener una fuente de energía, en este caso el carbón, dentro del mix. Abundando en este sentido Pablo García Manzano subrayó que en enero de 2017, con una gélida ola de frío, los precios altos por las nubes y un elevadísimo consumo eléctrico, "el papel que jugaron las centrales térmicas fue determinante para superar ese momento". También se cuestionó el control de los fondos mineros, a lo que el subsecretario dijo que cumplían con todas sus obligaciones legales.