"Los recibimos con los brazos abiertos". La gerencia del área sanitaria del Caudal cuenta los días para la incorporación, en el hospital Álvarez Buylla de Mieres, de los dos primeros médicos "exiliados" de Menorca (antes hubo otros en Ibiza) por el decreto que impone el título de catalán entre el personal sanitario (denominado coloquialmente "decretazo"). Él es un anestesista, que accedió a una vacante a través de la bolsa de empleo del Servicio de Salud del Principado (SESPA). La falta de estos especialistas estaba generando polémica en el área del Caudal. Ella es su mujer, es psiquiatra, y se unirá al equipo del Álvarez Buylla a través de una comisión de servicio por agrupación familiar. En el hospital Mateu Orfila de Menorca deja una plaza fija. El matrimonio es de origen argentino, con raíces familiares en Mieres, y prefiere no hacer declaraciones sobre el caso. Fuentes cercanas a la pareja afirmaron que, además del problema con el catalán, también se trasladan "por motivos familiares".
Estos dos médicos del Mateu Orfila son los primeros de una lista que podría ser muy larga. Tras el "decretazo", los profesionales tienen un plazo de dos años para conseguir una titulación lingüística que acredite un nivel B1 -básico- de catalán. Aunque fuentes conocedoras del caso afirmaron que al menos uno de los doctores que llegarán a Mieres carece de la citada titulación, desde la gerencia del área sanitaria del Caudal afirmaron que "no sabemos cuál es el motivo real para este traslado, en ningún caso se pregunta a nuestros profesionales". Lo que es seguro es que los recibirán "con los brazos abiertos". "Dada la escasez de médicos en la mayoría de especialidades, aquí son bienvenidos siempre que cumplan con los requisitos del SESPA", señaló Alejandra Fueyo, gerente del área sanitaria del Caudal.
Es el caso de este médico anestesista que, según Fueyo, "se apuntó a la bolsa y cumplió con todos los requerimientos que se establecen para los médicos españoles y que trabajan en España". "A nosotros nos importan los profesionales y son bienvenidos vengan de Baleares, de Ceuta o de Asturias", añadió.
El traslado de la psiquiatra al hospital del área sanitaria del Caudal es distinto. Ella no ha podido acceder a una bolsa de empleo del SESPA, ya que tenía su plaza fija en el hospital Mateu Orfila.
La doctora se trasladará al Álvarez Buylla a través de una comisión de servicios por reagrupación familiar. Este procedimiento requiere de dos permisos: el del hospital en el que ella trabajaba, el Mateu Orfila de Menorca, y el centro en el que trabajará a partir de ahora, el Álvarez Buylla de Mieres. Según confirmaron fuentes de la Consejería de Sanidad, en Asturias ya han hecho los deberes y todo está listo para recibirlos.
