La familia de Nerea J. J., de trece años y vecina de Ciaño, respiró ayer aliviada después de tres días en vilo. La joven había desaparecido del distrito langreano el sábado por la tarde. Tras una amplia movilización social -con una alerta activada por parte de la Guardia Civil y el protocolo de casos de desaparición de menores iniciado por la Policía, tras la denuncia presentada por la familia- la niña apareció en la madrugada de ayer en un apeadero de tren, en Candás.

La Policía atribuyó la desaparición a una "fuga voluntaria". Sin embargo, la versión de la familia difiere. Estrella Jiménez, tía de Nerea J. J., aseguró ayer que la menor tiene "marcas y golpes" que demuestran que "fue retenida en contra de su voluntad". Además, señaló que la chica "no pudo llamar a casa, se lo prohibieron" y que le habían sustraído el móvil. Los cuerpos de seguridad, que el martes afirmaron que se trataba casi con total seguridad de "una fuga voluntaria", no han iniciado ninguna investigación. Responsables del Cuerpo Nacional confirmaron ayer que -tras la inicial- no hay nuevas denuncias presentadas.

"A pesar de todo estamos muy contentos, ya dábamos a la niña por muerta, pensábamos que no volveríamos a verla", aseguró ayer Estrella Jiménez, sujetando un teléfono móvil que no dejaba de sonar.

El caso de Nerea J. J. ha tenido repercusión en todo el país, ya que la joven desapareció a plena luz del día del distrito de Ciaño. La Guardia Civil pidió la colaboración ciudadana, a través de las redes sociales, para encontrarla. También se distribuyeron carteles con una descripción de la joven, acompañados de una fotografía reciente.

La familia agradeció todas las muestras de cariño que han recibido. Poco después de que la niña estuviera de vuelta en casa, Estrella Jiménez publicó un extenso comunicado en su perfil de Facebook para dar las gracias a los vecinos por haberse volcado en estos últimos días y también para explicar su versión de los hechos, a la espera de conocer el relato íntegro de la menor. Según indicó la familia, la joven fue liberada en un apeadero de Candás en la madrugada de ayer.

Poco ha podido contar Nerea J. J., según su tía, desde su aparición. "Está totalmente ida, como en estado de shock, la pobre niña tras pasar tantos días retenida", afirmó Estrella Jiménez. Lo que sí sabe, según la versión de la familia, es que "estuvo todo el tiempo en Candás retenida por tres hombres, siempre en contra de su voluntad". Además, afirmó Estrella Jiménez, "El móvil se lo quitaron para que no pudiera llamar a casa y ha vuelto sin él. Le han robado un móvil caro, de 500 euros".

Aseguran que tienen pruebas. La joven "está marcada, tiene marcas por el cuerpo de haber recibido golpes". Es por eso que ayer, según la versión de la portavoz de la familia, tenían previsto acudir a los servicios sanitarios para someterla a un examen. También anunciaron que acudirían a la comisaría de la Policía Nacional de Langreo-San Martín del Rey Aurelio para presentar una denuncia de lo ocurrido durante la desaparición: "Sólo estamos esperando a que la niña se encuentre mejor y pueda explicar bien lo que ha pasado", afirmó la familia por la mañana.

A última hora de la tarde, según fuentes oficiales, aún no se había presentado ninguna nueva denuncia. Los agentes de Langreo aún no habían podido tomar declaración a Nerea J. J.