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La zona rural alega que la alta presión fiscal impide su desarrollo económico

Las asociaciones del valle de San Juan replican al Ayuntamiento de Mieres que el pago del IBI actual es "injusto" y está "mal desarrollado"

La zona alta del valle de San Juan, en Mieres. F.G.

Las asociaciones de vecinos del valle de San Juan acusaron ayer al Ayuntamiento de Mieres de estar estrangulando el desarrollo económico y demográfico de la zona rural del municipio aplicando una presión fiscal en los pueblos que se consideran "injusta" y "mal desarrollada". Esta queja llega después de que la citada zona del concejo tuviera la confirmación de que deberá seguir pagando el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). El gobierno local no contempla eximir a los vecinos del abono de este gravamen al patrimonio, como había solicitado el movimiento asociativo local. La decisión cierra las puertas a aplicar la medida en los pueblos. El gobierno local sostiene que ni hay motivos ni el Consistorio está en condiciones de reducir sus ingresos.

La coordinadora "L'Agüeria San Xuan" se mostró ayer muy crítica con los responsables municipales de IU. "Seguimos considerando y manifestando que muchos vecinos residentes en el medio rural no cuentan en sus propiedades con los servicios e infraestructuras necesarias y requeridas para que sean consideradas suelo urbano o asimilado. Por eso lo que reclamamos ya no es quedar eximidos por completo del impuesto, sino pagar lo justo", explicaron los portavoces de esta plataforma. A su juicio, el medio rural de Mieres necesita de manera inmediata la aplicación de una política social "especifica" que atienda las necesidades del territorio. Así, demandan una reducción de la presión fiscal a los vecinos, con una rebaja de impuestos, "que desde hace ya tiempo no han hecho más que subir". Además, piden que de manera "inmediata" el Ayuntamiento asuma posturas coherentes con los servicios "obligados" que se prestan a los habitantes de las zonas rurales del municipio. De igual manera, también reclaman que se apruebe la aplicación de una bonificación del 50 por ciento sobre la base liquidable del IBI rústico para las construcciones catalogadas por el catastro como imprescindibles para el desarrollo de explotaciones agrícolas, ganaderas o forestales. Esta bonificación siempre deberá pedirla expresamente el propietario afectado.

La coordinadora "L'Agüeria San Xuan" sostiene que la alta presión fiscal que sufre el medio rural de Mieres dificulta el desarrollo del proyectos vinculados a la hostelería, el turismo rural o negocios relacionados con la agrícolas, ganadería o actividades forestales. "Pensamos que la valoración de los terrenos según las expectativas urbanísticas no se han materializado ni desarrollado lo suficiente, y que, en las actuales circunstancias socioeconómicas que sufrimos en el concejo, existen dudas muy razonables sobre su posible perfeccionamiento", apuntan los portavoces de la coordinadora. Y añaden: "Entendemos que el método no es respetuoso con el actual sistema tributario; justo lo contrario de lo que persigue la Constitución".

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