Los establecimientos hosteleros las comarcas mineras esperan remontar sus datos de ocupación en agosto, ante el bajo número de reservas y pernoctaciones que tienen para este mes de julio, que debería ser uno de los más ajetreados del año. Tal y como aseguran los empresarios , los niveles de ocupación para este mes son menores que en años anteriores. Una situación que esperan que cambie el próximo mes de agosto, que tiene un número de reservas susceptiblemente mejor.

Luis Núñez, presidente de Asturcentral, que agrupa a establecimientos hosteleros de la Montaña Central señaló que este mes "va a estar bastante bajo de ocupación, y no remontará hasta la última semana". Núñez también resaltó que junio "tampoco fue demasiado bueno, porque el tiempo no acompañó y los niños aún estaban en el colegio". En su opinión, uno de los problemas que existen es que "seguimos siendo muy estacionales, porque aquí fue terminarse la temporada de esquí y cayó la ocupación". Aún así, este empresario asegura que "todavía hay esperanza, tenemos que espabilar y ofrecerle algo más a los clientes".

La situación es bastante similar en la comarca del Nalón, con una previsión "floja" para el presente mes y buenas expectativas para agosto. Manolita Piloñeta, del hotel La Pacha, en Laviana, señaló que "a pesar de las bajas previsiones, sobrevivimos, hay clientela fiel que viene cada año". Al respecto, Piloñeta hizo referencia a una familia de Andalucía "que lleva viniendo de manera ininterrumpida durante los últimos ocho años, y se quedan todo un mes". De forma parecida es la valoración que hace Maximino Vega, del hotel Arniciu, en Caso. "Con el tema del argayo y el mal tiempo, bajó mucho la gente, pero esperamos remontar en agosto, que es un mes que mueve a muchos turistas". Al igual que el resto de empresarios, Vega destacó que el presente mes "está bastante flojo".

Las novedades respecto a la navegabilidad de los embalses, con su limitación al pantano de Tanes y dejando fuera al de Rioseco también preocupan a los empresarios. Vega sigue mostrándose escéptico, y "hasta que no sea una realidad, no nos lo creeremos, llevamos mucho tiempo peleando para que hiciesen navegables los pantanos y, de momento, no hay nada cerrado". Desde Laviana, los responsables de La Pacha señalaban que se trata de un tema que, aunque no está directamente relacionado con el concejo, "nos afecta a todos, porque es como una cadena. Si se hace bien, y se tiene cierta permisividad, es posible que sea un lugar más atractivo y entonces los turistas podrían quedarse más días. Pero las restricciones anunciadas nos hacen pensar que no será algo tan positivo como esperábamos".