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El Gobierno de Sánchez aplaza al día 30 la reunión con los sindicatos por el carbón

FICA-UGT y CC OO quieren forzar que se modifique la decisión de la UE para el cierre de los pozos y que se elabore un plan minero hasta 2027

Mineros del pozo Carrio, en Laviana, durante su protesta en contra del cierre de la explotación de Hunosa.

Estaba fijada para hoy, pero la reunión de los sindicatos mineros con el Gobierno de Pedro Sánchez para analizar el futuro del sector tendrá que esperar todavía algunos días, hasta el día 30. Un aplazamiento que no ha sentado del todo bien a los representantes sindicales que son conscientes de que no hay un minuto que perder. Más cuando falta menos de medio año para que se aplique la Decisión 787 de la UE por la que la actividad extractiva deberá cesar a final de 2018.

A pesar del aplazamiento, los sindicatos mantendrán su discurso en el próximo encuentro, que podría resumirse en dos puntos: reclamar la modificación de la decisión de la UE para que los pozos no tengan que cerrar y la elaboración de un plan del Carbón que se alargue hasta 2027. Así de claro lo tenía ayer el responsable de Minería de FICA-UGT -federación en la que se integra el SOMA-, Víctor Fernández, que no podía evitar su malestar por el aplazamiento de la reunión. "No estamos contentos, pero esperamos poder alcanzar algún acuerdo en la próxima reunión", señaló. De la misma manera ocurría en CC OO. Su secretario de Industrias Extractivas, Jesús Crespo, afirmó que "lo importante es que la reunión se celebre, aunque de momento no nos han comentado qué vamos a tratar en ella".

La pretensión inicial de las centrales era sentarse con la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. Sin embargo, el encuentro será con los responsables del Instituto Allí, los sindicalistas defenderán que "aquellas minas que puedan seguir y sean competitivas tendrían que poder hacerlo", como había señalado Víctor Fernández, asegurando que "estamos en un proceso de transición energética, pero no es menos cierto que el 50% de la energía que se está consumiendo estos días proviene de combustibles fósiles". Un discurso similar el de su homólogo en CC OO. Jesús Crespo defendió que se busquen "alternativas para que se siga produciendo carbón autóctono" y aludió, al igual que Fernández, a que actualmente "hay una necesidad de carbón dentro del mix energético, así que habría que mantenerlo mientras exista esa necesidad". No sólo eso, el representante de CC OO aludió a otras ventajas de la extracción del carbón como son la garantía de suministro o su papel como regulador de los precios de la electricidad. El sindicalista no fue ajeno a la necesidad de una transición energética, "pero tiene que ser con los mineros dentro".

Desde FICA-UGT, por su parte, pretenden retomar la negociación del plan del carbón que ya estaban trabajando con el anterior Gobierno de Mariano Rajoy. Su intención es elaborar una hoja de ruta desde el 1 de enero de 2019 y con un horizonte temporal hasta 2027, en el que se incluya un apartado sectorial y también social.

La reunión llegará en un momento delicado para la minería. Teresa Ribera es partidaria de una transición energética exprés, lo que ha despertado numerosas críticas, tanto políticas como sociales. Y de hecho, este malestar se tradujo en vandalismo la pasada semana cuando amanecieron con pintadas varias sedes del PSOE en el Valle del Nalón y una del SOMA. Entre las sedes socialistas que registraron pintadas se encuentran la de Pola de Laviana (en la que milita y de la que fue secretario general, Adrián Barbón, actual líder de la FSA), Lada y La Felguera, mientras que en El Entrego fue el local del sindicato el que se vio afectado. En las pintadas se podían leer expresiones como "traidores" o "culpables". También los mineros del pozo Carrio de Laviana -el único de Hunosa que está abierto en el valle- hicieron paros con apoyo de todas las secciones sindicales.

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