El monumento que recuerda a Luis Adaro y Magro en el parque Dorado de Sama, escultura conocida también como "La carbonera", será sometida a una rehabilitación integral cuando se cumple cien años de su inauguración. El Ayuntamiento de Langreo adjudicará la actuación, que se abordará en cuatro meses, antes de que finalice este mes, aseguró el alcalde, Jesús Sánchez.

Unos trabajos que se suman a los realizados para la mejora del parque Dorado, donde se actuó en el estanque de los patos, en el quiosco de la música y en el parque infantil. La siguiente fase se centrará en la obra del escultor Lorenzo Coullaut Valera cuyo estado es "deficiente", según el estudio encargado por el ejecutivo municipal. Entre los objetivos de la actuación figuran la limpieza de la escultura y la eliminación de elementos y películas ajenas así como estabilizar los puntos de unión y los anclajes.

La escultura parte de un basamento de dos gradas, con el busto de Luis Adaro sobre cuatro semicolumnas. También muestra a una carbonera, sentada en los escalones, que recoge el carbón de una vagoneta. El análisis del estado de conservación del monumento concluye que, entre otras deficiencias, presenta fracturas y grietas, acumulación de suciedad, el repintado sobre el acabado original, indicó el regidor, y hacen necesario reponer parte de la mano derecha de la carbonera, que está rota, y el asa de la cesta.

En el estudio también se propone eliminar repintados en determinados elementos para recuperar el aspecto original del monumento. Ocurre con el negro asfáltico que tapa estructuras de bronce. En la primera fase se abordará una prelimpieza con aire a presión controlada y una aspiración posterior. Posteriormente se podría eliminar la capa asfáltica y retirar los compuestos y aglomerantes industriales y plásticos de las últimas intervenciones para recuperar la imagen original de la escultura. En ese momento se iniciará una nueva fase de limpieza, un tratamiento fungicida y el relleno de las juntas. Las actuaciones propuestas son de preservación y conservación, con la mínima intervención, cumpliendo las recomendaciones de los organismos especializados internacionales. El presupuesto ronda los 16.000 euros. El monumento, erigido por suscripción popular e inaugurado el 25 de julio de 1918, es un emblema del concejo y de la comarca.