La presión se acentúa sobre Pedro Sánchez y, en especial, sobre su ministra de Transición Energética. El gobierno asturiano salió ayer a respaldar las propuestas presentadas por los sindicatos mineros en defensa de un nuevo Plan del Carbón y de medidas para reindustrializar las Cuencas. La respuesta del Gobierno central, o al menos sus verdaderas intenciones, comenzarán a conocerse el 11 de septiembre, cuando las partes vuelan a reunirse en Madrid.

Pero antes de nada, para el Principado hay una prioridad inaplazable: "Hay que conseguir un interlocutor en la Unión Europea que permita que aquellas unidades de explotación competitivas puedan continuar su actividad sin la necesidad inmediata de devolver las ayudas percibidas, a finales de 2018". Así lo aseveró ayer el consejero de Industria, Empleo y Turismo, Isaac Pola, al valorar la reunión celebrada el lunes en Madrid. Para alcanzar este objetivo restan cuatro meses, por lo que se plantea como una tarea hercúlea, casi imposible, ante la actitud de la UE y el escaso interés político que ha despertado hasta ahora.

Otro asunto escabroso es el mantenimiento de las centrales térmicas de carbón, levantando el pie del acelerador de la descarbonización, para frenar el ritmo acelerado que en principio planteó el Gobierno socialista central. Pola señaló que "habría que habilitar un escenario en que las centrales térmicas que consuman el carbón autóctono puedan continuar su funcionamiento de una forma razonable durante los próximos años". Autóctono si alguna mina española sigue extrayendo mineral, si no fuera así, se respalda la actividad de las térmicas para mantener el sector energético.

El futuro de las comarcas mineras también fue puesto sobre la mesa de la reunión del lunes en Madrid y valorado ayer por el Consejero de Industria. A su juicio, parece "obligado" que se produzca una continuidad "en positivo de algunas medidas de reactivación de comarcas mineras, y también medidas específicas de carácter social en el ámbito del sector". En este caso sería recuperar los fondos mineros pendientes, así como instaurar unas nuevas que palien los efectos de la descarbonización, como plantean los sindicatos con un nuevo Plan Minero hasta 2026.

Isaac Pola añadió que el Principado respalda los planteamientos de los sindicatos de sumar actuaciones de ámbito social y de reestructuración del sector. "Nosotros estamos completamente de acuerdo con esa propuesta que realiza los sindicatos y habrá que trabajar en la formulación de ese plan, a parte de las medidas que afectan directamente al sector". Los sindicatos también reclaman un encuentro con el secretario de Energía o con la Ministra.