El Juzgado de primera instancia de Mieres ha admitido la comparecencia de Emilio Saracho, expresidente del Banco Popular, como testigo en una causa contra esta entidad financiera que inició un matrimonio de clientes del banco. La pareja, de avanzada edad, según explican desde el despacho de abogados Vallverdú, resultó afectada por la ampliación de acciones que hizo el Banco Popular en 2016. Como consecuencia de la ampliación, y tras la venta al Banco Santander hace algo más de un año, "muchos de los pequeños inversores del banco perdieron sus ahorros, como es el caso de este matrimonio", aseguran desde el despacho gijonés.

Ángel Ron era presidente del Banco Popular cuando la entidad llevó a cabo la ampliación de capital por 2.500 millones de euros, que entonces anunció como un "ejercicio de anticipación para fortalecer el banco ante un entorno desafiante". Emilio Saracho sustituyó a Ron al frente del banco en febrero de 2017. Cuatro meses más tarde, la Junta Única de Resolución (JUR) acordó la resolución de la entidad y su posterior venta al Santander por el simbólico precio de un euro. Esta situación afectó a un buen número de clientes, entre ellos el citado matrimonio de avanzada edad que decidió acudir a los tribunales para defenderse. Esta por ver cuándo citan a Saracho.

"Nosotros pensamos que el máximo responsable del Banco Popular debe rendir cuentas a sus clientes, razón por la cual solicitamos que Emilio Saracho compareciera y el juez ha considerado oportuno que así sea", destacó Rubén Cueto, socio director del despacho de abogados que lleva el caso. Cueto subrayó que "es necesario que las entidades financieras se acostumbren a dar explicaciones sobre sus más que cuestionables actuaciones puesto que están en juego los ahorros y el patrimonio de sus clientes."