Un montañero gijonés de unos 60 años falleció ayer en el parque de Redes, en las proximidades del refugio de Brañagallones, cuando realizaba una ruta junto a otros componentes de un grupo de montaña. El hombre se sintió indispuesto cerca de la zona del Colláu Arenes. Sus compañeros avisaron a los servicios de emergencia, que acudieron a bordo de un helicóptero medicalizado pero no pudieron hacer nada por salvar la vida del hombre. Todo hace indicar que sufrió un fallo cardíaco. El montañero estaba alojado con sus compañeros del grupo de montaña en el refugio de Brañagallones. De ahí salió para realizar la ruta del Canto del Oso. Se trata de la duodécima muerte de un montañero en Asturias en lo que va de año.

El suceso tuvo lugar sobre las 13.33 horas del pasado sábado. A esa hora, el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) recibió la llamada alertando de que un montañero que se encontraba cerca del refugio de Brañagallones se encontraba indispuesto. Al no haber acceso rodado, se desplazó a la zona a un equipo sanitario en helicóptero. El médico sólo pudo certificar la muerte, por causas naturales, del hombre. Una vez recibida la autorización judicial, su cuerpo fue trasladado al Hospital Universitario Central de Asturias.

El hombre estaba alojado con un grupo de diez montañeros de Gijón en el refugio de Brañagallones. Habían llegado en la jornada del viernes para disfrutar de un fin de semana de montaña en este paraje de Caso.