Más de 23.000 personas en Asturias se verán beneficiadas durante la segunda fase del Programa de Ayuda Alimentaria a las Personas Desfavorecidas, que repartirá casi 650.000 kilos de alimentos a través de 113 organizaciones de reparto. La delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa, acudió ayer hasta las instalaciones de la Fundación Banco de Alimentos, ubicadas en el polígono industrial de Argame, coincidiendo con el inicio del reparto. En su visita estuvo acompañada por Bernardo Sopeña, presidente de la Fundación Banco de Alimentos de Asturias; así como de Eva Fernández, secretaria general de Cruz Roja de Asturias, ya que esta ONG también se ocupa de gestionar el programa.

El Programa de Ayuda Alimentaria comprende la compra de alimentos adquiridos en el mercado, su suministro a los centros de almacenamiento y distribución, y el reparto entre las organizaciones de reparto autorizadas, quienes a su vez los entregan gratuitamente a las personas más necesitadas. El programa está cofinanciado en un 85% por la Comisión Europea, a través del Fondo de Ayuda Europea para los Más Desfavorecidos (FEAD), y en un 15% por los presupuestos de la Administración General del Estado. Losa quiso recalcar que este programa "está dentro de las medidas que ha tomado el Gobierno central para acabar con la desigualdad, ya que nunca habrá igualdad si falta lo básico que es la alimentación". La delegada del Gobierno también hizo alusión a otras medidas, como la universalización de la sanidad y el bono eléctrico para luchar contra la desigualdad en España.

La segunda fase del Programa de Ayuda Alimentaria supone el suministro de 646.580 kilos de comida, con un valor económico total de 609.812,06 euros para 23.068 personas. Entre los alimentos que se van a repartir se encuentran cereales, legumbres cocidas, pasta alimenticia, conservas de pescado, fruta en conserva, cacao, galletas, leche, alimentos infantiles y conservas vegetales. Con anterioridad al reparto, se ha hecho un control desde el Área de Agricultura y Pesca de la Delegación del Gobierno y la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) en los propios almacenes para verificar la adecuada recepción de los alimentos.

Sopeña, por su parte, señaló que el número de beneficiarios no ha cambiado demasiado en los últimos años. También hicieron referencia a los "casos aislados" en los que se ha encontrado comida procedente de este programa sin abrir en contenedores de basura. Losa quiso hacer un llamamiento para que, "si les ha sobrado comida o no pueden utilizarla, que no la tiren, que contacten con Cruz Roja o el Banco de Alimentos para que vayan a recogerlo; y después analizaremos por qué ha ocurrido esto con la comida con la intención de que no se desaproveche".