El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Mieres ya está listo para su revisión externa. El documento, que lleva en tramitación tres lustros, está cerrado y listo para ser evaluado por las entidades públicas de las administraciones regional y estatal que le tienen que dar el visto bueno.
El esperado PGOU pasará mañana por Comisión informativa y el jueves de la semana que viene se presentará al Pleno para aprobar su presentación a lo que se conoce como coordinación interadministrativa. De esta forma, el expediente será trasladado a una larga lista de entidades competentes, como la Cuota y la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC), por poner dos ejemplos. Estas entidades públicas tienen un plazo que suele oscilar entre uno y cuatro meses para informarlo. A continuación, el Ayuntamiento deberá contratar a una empresa externa especializada para que dirija la última fase de tramitación del documento, que conllevaría su aprobación inicial y la apertura de un periodo de alegaciones. Toda esta nueva tramitación llevara, como mínimo, otro año más. La gestación de la nueva normativa urbanística para Mieres ha conllevado un farragoso proceso de casi tres lustros, en los que se ha pasado desde por quiebra de la empresa redactora hasta por alegaciones de la Cuota, que conllevó que el documento inicial tuviera que volver varias veces a revisarse y redactarse.
