En 1983, el Gobierno de Felipe González expropiaba Rumasa, Garci ganaba el "Oscar" por "Volver a empezar" y salía al mercado el primer compact disc, que amenazaba con jubilar los vinilos. También fue el año en que se subían por primera vez a los escenarios Luis Estrada, Emilio García, Roberto González y Arsenio Fernández-Nespral como integrantes del "Cuarteto Torner". La última fue el pasado viernes, en el teatro de La Felguera, en el marco de una gala organizada por el Ochote Langreano y ya sin García, que falleció el pasado mes de septiembre tras una larga enfermedad. Como bagaje de esta longeva formación quedan 35 años de "amor incondicional a la música", 46 discos, 2.135 actuaciones y numerosos premios y reconocimientos, entre ellos el de "Asturiano del mes" de octubre de 2008 de LA NUEVA ESPAÑA por su labor en la defensa de la música popular.

"Cuando empezamos nunca pensamos en estar sobre los escenarios 35 años como cuarteto, ha sido algo casi milagroso", explicó a este diario Fernández-Nespral, que apuntó que otras formaciones similares alcanzaron las dos décadas de trayectoria: "Un recorrido tan prolongado es difícil de mantener porque, cuando se unen dos personas o más en un proyecto, en este caso musical, siempre pueden surgir en momentos determinados diferentes puntos de vista. Pero a nosotros siempre nos unió nuestro amor por la música coral".

El integrante del "Cuarteto Torner" también expresó que, "desde hace años", los componentes de la formación tenían la decisión tomada de que "en cuanto faltara uno de nosotros se disolvería el cuarteto". La muerte de Emilio García el pasado mes de septiembre, además de ser "un varapalo muy duro en lo personal", fue el detonante que llevó al grupo a poner punto y final a su trayectoria. "Teníamos claro que si alguno de nosotros no estaba, no sería reemplazado. Ya tenemos una edad y el nuevo componente debería aprender todo el repertorio. Además, Emilio era bajo, no abundan mucho y es una de las cuerdas más difíciles".

El Encuentro de Cuartetos y Ochotes, organizado el viernes en La Felguera por el Ochote Langreano y en el que se rindió homenaje al "Cuarteto Torner", fue el momento y el lugar elegidos para cerrar su etapa. "Es el final de nuestra trayectoria de manera oficial, aunque puedan surgir ocasiones en las que cantemos de manera informal. Empezamos hace 35 años con una actuación en Ciaño y nos vamos con otra en La Felguera, también en Langreo". La pieza escogida para la despedida no podía ser otra: "Langreanina".

Un último disco

Fernández-Nespral también explicó que podría haber un último adiós en forma de disco, que haría el número 47. Se trata de un proyecto que no está cerrado y que incluiría habaneras, piezas asturianas y canciones nuevas. El prolífico recorrido discográfico del "Cuarteto Torner", unido a su intensa presencia en los escenarios es una muestra más de su impronta y del enorme hueco que dejarán en la escena musical asturiana.