Llega el invierno y los vecinos de Soto están preocupados. Temen que las inclemencias meteorológicas agraven, aún más, el estado de deterioro de la torre medieval de la localidad. Catalogada Bien de Interés Cultural (BIC), y lugar vinculado a la historia de Doña Urraca, lleva meses esperando por una obra que abordará de forma subsidiaria el Ayuntamiento. "Tememos que, al terminar el invierno, no quede ya nada en pie".
La torre ya no es redonda. El inmueble data de la época medieval y, mitad leyenda mitad historia, pudo ser el lugar en el que cortejaron Alfonso VII de León y Doña Gontrodo, padres de Doña Urraca. Durante años, fue el emblema turístico del concejo. Hasta que empezó el deterioro y nadie puso remedio. La torre tiene propietarios, herederos de los últimos dueños registrados, pero nunca llegaron a ponerse de acuerdo en el futuro del inmueble.
Hubo oportunidades. Hace una década, cuando la torre ya no pasaba por su mejor momento, un empresario presentó un proyecto para comprarla. Pretendía reformarla y convertirla en un establecimiento hostelero de referencia. Pero los propietarios no se pusieron de acuerdo en la cuantía ni tramitaron la transacción. El Ayuntamiento consiguió una partida de fondos mineros para adquirirla, pero tampoco llegó a buen puerto.
"La torre, mientras unos y otros discutían, fue deteriorándose mucho", explican los vecinos. Hasta llegar a su estado actual: tan sólo una pared está en pie y hay graves daños en la estructura. El Principado, a instancias del Ayuntamiento, decidió intervenir. Elaboró un proyecto que recoge todos los daños del monumento, con el objetivo de tramitar una obra subsidiaria si los propietarios no responden.
De momento no han respondido. Y los trámites siguen su cauce. De ejecutarse esta obra, será la primera intervención de estas características en un BIC. Los propietarios, según el Principado, se enfrentarán a sanciones por no haber atendido a sus requerimientos.
"El Ayuntamiento nos mantiene informados de los trámites, pero no sabemos lo que podrá soportar la torre", apuntaron desde la asociación vecinal. A pesar de su mal estado, sigue despertando la curiosidad de los turistas. Aún ayer, un grupo de excursionistas llegaron a Soto para conocer la torre en el que surgió el amor entre los padres de la primera Reina de Asturias, y posible lugar de nacimiento de Doña Urraca.
