La concejalía de Desarrollo Urbano Sostenible anunció ayer que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Mieres ya se encuentra en fase de coordinación interadministrativa o, lo que es lo mismo, el documento ya ha sido enviado a los concejos limítrofes, administraciones y organismos públicos que puedan estar afectados por razón de sus competencias para que informen sobre el mismo. De esta forma, el gobierno local considera que el procedimiento que arrancó hace y 14 años ve "el final de túnel". Aún así, será complicado que el nuevo PGOU pueda aprobarse durante el próximo año de una manera definitiva.

El gobierno local explicó ayer que una vez el resto de administraciones y entidades implicadas valoren los informes y se aborden los cambios que requieran, el Plan General de Ordenación Urbana pasará a aprobación inicial. "La fase de coordinación interadministrativa es un trámite obligatorio dentro del proceso de aprobación de este documento que llega una vez culminada la parte de elaboración municipal del expediente", destacaron los portavoces del equipo de Aníbal Vázquez.

"Con el trabajo municipal ya finalizada y el inicio de esta fase de coordinación interadministrativa se logra superar una etapa muy importante y ya se ve la luz al final del túnel en el camino de aprobación del nuevo PGOU", remarcaron desde el gobierno local. Los gestores de IU asumieron el procedimiento como "complicado". Durante casi tres lustros, el documento se enfrentó, subrayaron, "a distintos obstáculos importantes en una tramitación que suele prolongarse en el tiempo".

IU dijo hace siete años el PGOU necesitaba revisarse. En teoría, la anterior administración socialista lo había dejado cerrado, pero el documento no contentó a los actuales responsables municipales. En este tiempo, barrios muy deteriorados con el de Requejo, llevan años a la espera de una norma urbanística que aclare si se apuesta por la conservación del barrio o se autoriza su transformación.