Langreo despidió ayer con dolor y consternación a Alberto Benito Jiménez, portavoz municipal del PP. La iglesia de Santiago Apóstol de Sama se quedó pequeña para acoger a los numerosos amigos y vecinos que quisieron asistir para acompañar a sus familiares en estos duros momentos. Representantes de su partido a nivel regional, comarcal y local acudieron a la ceremonia del último adiós a Alberto Benito, del que el sacerdote José Alegre destacó "su inteligencia prodigiosa, su alegría y tenacidad y constancia que ponía en todos sus proyectos".

"Tenía un corazón enorme y era una persona capaz de animar a la comunidad", comentó el cura que presidió el oficio religioso en el templo de Sama, que destacó el buen carácter del concejal, que falleció de forma repentina el pasado miércoles a los 74 años. La familia de Alberto Benito agradeció al final del funeral el "cariño" de todos los asistentes. "Siempre va a estar en nuestros corazones", añadió.

Con un poema de José María Valverde concluyó la ceremonia en la iglesia de Sama, a unos metros del Ayuntamiento, donde las banderas ondearon a media asta con crespón negro los dos últimos días en señal de luto. También se aplazó el pleno previsto para el jueves.

Alberto Benito, que fue profesor, estaba preparando la sesión plenaria el miércoles en la sede del PP cuando se sintió indispuesto y fue trasladado al hospital de Riaño, donde falleció. La corporación municipal destacó "el honor de trabajar en la institución con una persona firme en la defensa de los planteamientos de su partido, pero siempre educado y respetuoso con los de los demás". Sus compañeros de partido remarcaron su "talante dialogante y conciliador".