"La Madre Naturaleza está haciendo su trabajo, ocultando nuestro patrimonio minero. Si no se hace algo, se perderá", advirtió José Luis Cabo, cronista oficial de Riosa, en la primera Jornada sobre Minas de Riosa: Patrimonio, arqueología y su protección, organizada por la Asociación Cultural "Los Averinos" de Lloreo, que contó con la colaboración de los ayuntamientos de Riosa, Morcín y Mieres, Tonastur y el Club LA NUEVA ESPAÑA de las Cuencas.

El acto fue moderado por José Manuel García, que excusó la presencia de la alcaldesa riosana por causas familiares. José Luis Cabo realizó una minuciosa exposición de la andadura de la explotación hullera del coto Riosa-Morcín desde mediados del siglo XIX y de las complejas infraestructuras creadas por la empresa Minas de Riosa a lo largo de los valles de Canales y La Raíz-La Esperanza, así como del trazado del ferrocarril carbonero La Foz-La Pereda, "una obra faraónica en su época". Túneles, puentes, trazados de vías, pasos elevados, muros de contención, edificaciones, bocaminas, fosos, cabrestantes, estaciones, depósitos, reposan en la actualidad repartidos a lo largo de los 9 kilómetros de una ruta "que aún muestra las cicatrices de la explotación". "Deberíamos aprender de nuestra historia y lograr la unión de los tres concejos implicados para conservar y dar a conocer todo este patrimonio", concluyó el cronista.

A continuación, la historiadora Mercedes Fernández concentró su intervención en el interés de la senda que sigue el trazado del ferrocarril La Foz -La Pereda, llamando a la implicación popular. "El apreciado carbón que se transportaba por aquí podría ser sustituido por nuevas iniciativas de impulso económico y laboral, de atractivo turístico y de mejora de las infraestructuras básicas que la zona", aseveró Fernández. "No es sólo por el interés arqueológico: la ruta también nos pone en contacto con nuestro rico patrimonio vegetal y con la vida salvaje", dijo la historiadora morciniega. "Minas de Riosa hizo un alarde de ingeniería que constituye un hecho histórico que ha de ser difundido", continuó, reclamando la actuación en dicha senda, "un paseo sencillo que debería ser limpiado, asegurado y señalizado".

Por su parte, Juan González Ponte, concejal de Cultura del Ayuntamiento de Mieres reconoció que el interés sobre la protección del patrimonio ha llegado tarde a España "un país nada ejemplar en este aspecto". "Llevamos cuarenta años de retraso; hemos de cambiar de mentalidad e implicarnos en la defensa de la cultura y el patrimonio", manifestó el edil mierense, que considera imprescindible una dotación presupuestaria apropiada y que entiende conveniente la intervención del sector empresarial y el impulso del voluntariado. Maximino García, alcalde de Morcín, reconoció la necesidad de recuperar el patrimonio minero, "que abandonamos porque nunca creímos que lo fuéramos a necesitar como fuente de riqueza y empleo". García manifestó la conveniencia de que los tres concejos implicados, Riosa, Morcín y Mieres, acuerden medidas que frenen la despoblación y el desempleo.