Retrasos, averías y un tren tan pequeño que los usuarios lo han bautizado como "Tamagotchi". Así es la situación actual de la línea de Renfe Cercanías (antigua Feve) en la comarca.

De nada ha servido, según parece, la movilización que congregó a cientos de vecinos en Moreda. Los usuarios del tren gritaron "no" a las deficiencias del servicio. Pero los fallos en la línea no paran: el jueves, el servicio estuvo cubierto por un autobús por la avería de un tren y lo mismo ocurrió ayer durante media tarde. Por si fuera poco, se han puesto en circulación los trenes 2900.

Son unos convoyes pequeños, con un único vagón: "Es imposible que así se ofrezca un servicio adecuado. Para empezar, es imposible que vayan todos los viajeros", aseguraron desde la Plataforma en Defensa del Ferrocarril Baíña-Collanzo. Añadieron que, en las horas punta del día (como la de entrada al trabajo o estudiantes) "muchos viajeros tienen que ir de pie". Esto provoca que los usuarios vayan eligiendo otros medios, con el consiguiente "bajón" en la actividad de Renfe Cercanías. "Tememos que quieran terminar con la línea", clamaron.