La organización asegura que la traca del encendido de las luces navideñas de Laviana contaba con las medidas de seguridad "necesarias y suficientes" para el tipo de descarga pirotécnica que se llevó a cabo. El grupo político de Ciudadanos en el concejo denunció que la traca había causado tres heridos leves, y ha reclamado al Ayuntamiento los permisos para que se llevara a cabo.

Desde la Asociación de Autónomos de Laviana (Aulav), organizadora del acto, se anunció que en enero "plantearemos en la próxima asamblea de enero el cese total de actividades" realizadas por el colectivo, que a lo largo del año organiza desde el Carnaval a diversos certámenes gastronómicos, así como el alumbrado navideño. "La actitud de un nuevo partido político que irrumpe en nuestro concejo en estos últimos tiempos nos tiene descolocados. No estamos dispuestos a que se instrumentalice nuestro trabajo para hacer campaña política". Aulav expuso que se mantuvieron reuniones con todos los grupos municipales con representación en el Ayuntamiento para explicar las actividades a desarrollar, y "nos manifestaron su total conformidad".

"Aulav", expuso su presidenta, Rocío Estepa, "está para desarrollar actividades en el municipio, que potencien y dinamicen la vida social, empresarial y de ocio, no estamos para nada más, y desde luego no estamos dispuestos a hacer de parapeto de la política, tema en el que no entramos y nunca hemos tocado".

Respecto a lo ocurrido el día del encendido, desde la organización del acto se señaló que la traca fue una "pirotecnia fría", que "no causa quemaduras ni lesiones por contacto, pues se utiliza en escenarios interiores y teatros". El colectivo explica que "se tomaron todas las medidas necesarias y suficientes para una descarga de este tipo", un tipo de pirotecnia conocida "en el argot como cajas chinas, y que cualquier persona puede comprar y tirar, siempre que no se perjudique a nadie". Aún así, explican, "velando por la seguridad, se contrató a una empresa pirotécnica" para la traca. "Se acordonó la zona de lanzada, se puso un perímetro de seguridad para que nadie estuviera cerca", añadieron.

Al comenzar la descarga, "basura pirotécnica (cartones y algún cilindro de cartón) cayó entre alguno de los asistentes". La empresa "informó desde el primer minuto de lo que había pasado", y explicaron a la Policía Local y a los afectados que las manchas que llevaban, "que pensaban que era pólvora", eran en realidad "barro que se usa en la fabricación de estos artilugios, con la función de lastre", para darles peso. Se puso a disposición de los afectados "el seguro de responsabilidad civil, por si debían dar parte de cualquier daño". Al final, un asistente sí presentó denuncia.