La Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) ha comenzado los trabajos de conservación y mantenimiento de los cauces del río Turón, del río San Juan en el tramo anterior a su desembocadura en el río Caudal, del río Valdecuna en El Pedroso, del río Aller en Bustiello y de los arroyos Duró y La Regurerona. Todas las actuaciones -que serán llevadas a cabo por la empresa pública Tragsa— están desarrollándose en el municipio de Mieres.

Las sucesivas avenidas en los ríos de las cuencas hidrográficas del Principado "han originado diversidad de afecciones derivadas fundamentalmente del desplome de especies arbóreas del dominio público y márgenes, movimiento y posterior depósito de acarreos y otros residuos sólidos", han explicado desde Hidrográfica.

Por este motivo "se ha actuado principalmente en los tramos en los que por sus condiciones actuales suponían una situación de riesgo o peligro en sus márgenes o en las inmediaciones de las infraestructuras".

La actuación, explicaron desde la entidad, incluyó los siguientes trabajos: retirada de rapones de árboles y ramajes de puentes y tramos de cauces, poda o tala en el dominio público hidráulico y zonas de ribera de árboles en situación de riesgo, desbroce selectivo de vegetación intensiva en las orillas o zonas de ribera, retirada de acarreos y otros residuos sólidos de los cauces y refuerzo de protección de defensas de margen existentes, afectadas por las avenidas.

Esta actuación, han señalado desde la Confederación Hidrográfica, forma parte de un Plan general de mantenimiento y saneamiento de cauces aprobado por la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, presupuestado en casi 600.000 euros, y que se desarrollará hasta julio de 2019.

Hace unas semanas, se acometió una limpieza del río Duró a su paso por el barrio de La Villa, en Mieres.