El cementerio de Ciaño se quedó pequeño ayer para despedir al joven Hugo Fernández Zapico, de 24 años, segunda víctima mortal del accidente de tráfico ocurrido hace mes y medio en la Güeria de Carrocera (cerca de El Entrego). Tras el velatorio organizado en el tanatorio de Sama, el féretro con los restos mortales del joven fueron trasladados hasta el camposanto langreano, donde hubo un responso, antes de recibir sepultura. El funeral se celebrará hoy a las seis de la tarde en la iglesia parroquial de San Esteban, en Ciaño.

Junto a los padres y el hermano del fallecido, también acudieron hasta el cementerio familiares y amigos, entre los que el dolor por la pérdida del joven era más que presente. Todos destacaban el carácter "muy afable" de Hugo y se les hacía complicado aceptar esta pérdida. Más cuando el fallecido había conseguido salir de la UCI del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), en Oviedo, donde estuvo durante semanas en coma inducido, y había subido a planta. Sin embargo, a pesar de su fuerza, la gravedad de su estado acabó causándole la muerte.

La familia quiso agradecer, eso sí, el trabajo y cariño del personal de HUCA durante todo este tiempo, así como a las personas que se interesaron por el joven desde el suceso.

Los hechos ocurrieron el pasado 25 de noviembre, sobre las 20.30 horas, a la altura de La Llaniella, en el kilómetro 1,200 de la AS-338, que une El Entrego y Bimenes y da servicio a los núcleos de la Güeria de Carrocera. El coche, en el que viajaban los fallecidos junto a otros tres jóvenes, circulaba por un tramo descendente, en dirección a El Entrego, cuando, por causas que se desconocen se salió de la vía, llevándose por delante una valla protectora. El vehículo salió literalmente volando sobre una pronunciada pendiente, hasta que impactó contra el suelo dos decenas de metros más allá, en un camino asfaltado próximo a una zona de huertas y pequeñas construcciones. Una joven, Yoselín Vega, novia de Hugo Fernández, murió en el momento.