El caso de "Tyson" y "Princesa" conmocionó a Asturias. Los dos perritos fueron rescatados por el Seprona y la protectora "Una y mil huellas" de la casa en la que estaban encerrados. Los había adoptado una mujer que decía ser animalista, pero ellos llevaban días sin comer. Ahora, la protectora que se ha hecho cargo del caso hace un llamamiento para pedir ayuda: los tratamientos son caros y los perros aún tienen un largo camino por delante. Entre otras iniciativas, están a la venta camisetas de apoyo.

"Esta protectora, a pesar de no tener nada, no miró para otro lado y acudió a la llamada de los vecinos que denunciaban la terrible situación de abandono y maltrato que estaban sufriendo Tayson y Princesa", señaló Eva Díaz, responsable de "Una y mil huellas protectora". La casa del infierno para "Tyson" y "Princesa" estaba en la localidad allerana de Moreda.

Los animales fueron trasladados de urgencia a una clínica veterinaria. Estaban gravemente desatendidos, deshidratados y "al límite". "Tenemos una deuda importante con el centro veterinario que los trató", señaló Díaz. Ahora han sido trasladados a otro centro, en el que acuden a adiestramiento diario para garantizar su inserción cuando vuelvan a encontrar familia. Todos los datos para ayudar están en la página oficial de "Una y mil huellas protectora" en Facebook.