La llegada de un bebé es una alegría para la familia. Pero pueden surgir complicaciones. Buena prueba son los bebés prematuros, cada vez más en Asturias. Cifra que aumenta, según los expertos, por el incremento de la edad entre las mamás.

En mejorar la asistencia de bebés prematuros o que nacen con problemas de salud inesperados, también en la tranquilidad de las familias, trabajan las consejerías de Sanidad y Servicios y Derechos Sociales del Principado de Asturias. Responsables regionales acudieron ayer a Mieres a la Jornada de buenas prácticas en coordinación sanitaria: se trata de un programa de coordinación entre servicios para mejorar la calidad asistencial. Además de los bebés, también son beneficiarios de esta metodología coordinada otros colectivos como pacientes de salud mental o mayores que viven solos. Lleva dos años en marcha y ya hay cifras para hablar de buenos resultados: el número de bebés con ayuda para la dependencia, en la zona central de Asturias, se ha incrementado en un 110 por ciento.

"Trabajar juntos para prevenir complicaciones en situaciones ya complicadas". Es el objetivo de este trabajo coordinado, según explicó ayer Pilar Varela, Consejera de Servicios y Derechos Sociales del Principado. La responsable regional acudió a inaugurar la jornada y anunció, en el salón de actos del Hospital Álvarez-Buylla de Mieres, la puesta en marcha de la unidad de convalecencia mixta en Gijón. Se trata de un lugar donde las personas que requieren cuidados de enfermería tras su hospitalización podrán recibirlos antes de su vuelta a casa. "Empezará a funcionar el próximo mes, y la idea es replicarla en todas las áreas", señaló Varela.

Ayudas

Es una unidad destinada, principalmente, a personas mayores que viven solas. Para los más pequeños, las medidas adoptadas desde el Principado son distintas. La directora general de Planificación, Ordenación e Innovación Social, Nerea Eguren, explicó que "antes, cuando un bebé nacía prematuro o con algún problema de salud, las familias tenían que acudir a servicios sociales y esperar por los trámites para conseguir las ayudas a la dependencia". Ahora es el propio Hospital Central de Asturias (HUCA) -donde se encuentra el servicio de neonatología del área central- el que tramita las ayudas para las familias. El mejor resultado, según fuentes del programa de coordinación, son las cifras: de unos treinta bebés con ayuda a la dependencia, a los más de setenta en la actualidad.

Una necesidad que querían cubrir porque cada vez hay más bebés que nacen antes de que el embarazo llegue a término (37 semanas de gestación). Esto se debe, en gran medida, al retraso en la edad de la maternidad. Según los expertos, en madres añosas son más frecuentes los embarazos múltiples (debido a los tratamientos de reproducción asistida, entre otros factores). Y los embarazos múltiples llevan parejo un mayor riesgo de que los bebés sean prematuros.

Es normal que haya preocupación ante un parto prematuro. Pero los expertos llaman a la calma. Daniel Mata, jefe de Pediatría en el Hospital Álvarez-Buylla, destacó ayer que la atención de los bebés que nacen antes de que el embarazo llegue a término "ha pegado un vuelco en los últimos años". El pronóstico, añadió, "ha mejorado espectacularmente". Cada vez surgen menos complicaciones y en la mayoría de los casos, tiempo después en consulta, "resulta casi imposible saber si un niño nació o no prematuramente".