El Ayuntamiento de Mieres inició hace unos días las obras del aparcamiento de Oñón, que supondrán las habilitación de trescientas plazas de estacionamiento en lugar de las 150 que hasta ahora se ofrecían en precario en esta zona. Sin embargo, a consecuencia de estos trabajos, estos días es casi imposible aparcar en el centro de la villa, dando cuenta de la necesidad que existe de plazas de estacionamiento. Una falta de espacios que se hace notar, sobre todo, por las mañanas, lo que obliga a los conductores a buscar aparcamiento en los barrios más cercanos al centro, como Santa Marina, Vega de Arriba o San Pedro.
De todos modos, en el Consistorio de Mieres son conscientes de los problemas que existen en la villa a la hora de buscar aparcamiento. Una situación que empeorará cuando se construya el nuevo parque de La Mayacina. Esto supondrá la desaparición de unos trescientos aparcamientos. Parte de ello se compensará con la ampliación del espacio en Oñón, que pasará de 150 a 300 plazas. Además, está prevista la instalación de un nuevo sistema de alumbrado y una mejora de la circunvalación viaria en el área de influencia, para lo que se construirá una nueva glorieta en la intersección de las calles Avenida de Méjico y Numa Guilhou y un nuevo acceso al parking desde la calle Escuela de Capataces. No será la única actuación prevista. También se habilitarán aparcamientos en dos de las tres parcelas que han sido expropiadas por mandato judicial al grupo Goncesco. El gobierno local proyecta la creación de casi 90 plazas de estacionamiento distribuidas entre la finca de la calle La Pista y el solar del Sinagua.
Finalmente, el Ayuntamiento de Mieres asfaltará las dos parcelas que están sin uso en la zona sur de La Mayacina, una de ellas actualmente abierta a los coches, creando 300 plazas.
