La central térmica de Lada ha sufrido un recorte de delegados en sus últimas elecciones sindicales que también ha supuesto una redistribución de las representación de las diferentes centrales. Esos comicios dieron como resultado la asignación de dos representantes para el SOMA-FITAG-UGT, otros dos para CC OO y uno para la Asociación de Técnicos y Profesionales de la Energía-Colectivos de Cuadros (ATYPE-CC).

Con el nuevo reparto, el SOMA perdió su mayoría absoluta. En las anteriores elecciones, en 2014, en las que se repartían nueve delegados las distribución había sido de cinco para el SOMA-FITAG-UGT, dos para CC OO, otro para (ATYPE-CC) y uno más para el Sindicato Independiente de la Energía.

La térmica de Lada se enfrenta a un momento crítico, tras la petición realizada al Gobierno por la propietaria de la instalación, Iberdrola, para cesar la actividad.