La Policía Local de Mieres detuvo el pasado viernes 2 de febrero a un joven de 25 años que causó un aparatoso accidente de tráfico en el barrio de San Pedro. El conductor se negó a ser sometido a las pruebas de alcoholemia y sustancias psicotrópicas. Los agentes municipales que intervinieron constataron que era evidente que se encontraba bajo lo afectos de algún tipo de bebida alcohólica o sustancia tóxica. M. F. G. fue acusado de un delito contra la seguridad vial.

El accidente, según explicó la Policía Local de Mieres, se produjo unos minutos antes de la cuatro de la madrugada. En ese momento el conductor intentaba acceder con su vehículo, un Volkswagen Jetta, a la calle Luis Braille desde Alejandro Casona. Al maniobrar impactó contra una señal de sentido obligatorio y, posteriormente, contra dos vehículos que estaban correctamente estacionados en dicha calle, concretamente en la zona izquierda de la misma según el sentido de circulación. El vehículo causante de los daños quedó en medio de la calzada mirando en el sentido contrario de la marcha. El conductor, con síntomas evidentes de encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas, fue trasladado a la jefatura de la Policía Local, donde se negó, siempre según la denuncia, a someterse a las pruebas legalmente establecidas para la comprobación de la tasa de alcoholemia. Por lo cual, y ante su retirada negativa a pasar la prueba, fue detenido. Los vehículos siniestrados fueron retirados por la grúa y trasladados al depósito municipal al quedar la calle totalmente cortada.

La Policía Local, dos días después del citado incidente, detuvo a otro conductor, en este caso, tras dar un nivel de 0,76 miligramos de alcohol por litro de aire expirado. A. S. , de 52 años de edad, fue sorprendido durante un control rutinario poco después de la medianoche. El detenido intentó zafarse dando marcha atrás al acceder a la calle don estaban los agentes.