Las obras para sustituir prácticamente todo el alumbrado público del concejo de Langreo ya han comenzado. Lo han hecho por la zona rural del municipio, en el entorno de El Carbayu. Estas obra se dividen en dos fases, la primera con una inversión cercana al millón de euros, y la segunda, que empezará en breve, valorada en dos millones. Con la medida el Ayuntamiento espera ahorrar 300.000 euros anuales en la factura de la luz. Además, se pretende dar un "mejor servicio", ya que el sistema de alumbrado estará controlado de forma electrónica, y se podrá saber en tiempo real dónde se produce una avería o si es necesario cambiar las luminarias de alguno de los puntos de luz.

El alcalde de Langreo, Jesús Sánchez, explicó ayer que los trabajos "se están empezando por la zona rural". Tal y como apuntó, no se trata tan solo de cambiar las bombillas tradicionales por puntos de luz de tecnología led. También se realizan actuaciones en las cajas e incluso en el propio sistema del cableado, que se renueva. Está previsto que entre las dos fases del proyecto se sustituyan el 90,2% de todas las luminarias del concejo: 9.645 de las 10.687 existentes. De ellas, 5.839 están en la zona urbana.

"No solo se va a ahorrar en el consumo", expuso el Alcalde. También en "la potencia contratada". La primera fase sustituirá en treinta días buena parte de los puntos de luz públicos. Esta actuación sufrió cierto retraso porque, durante el proceso de contratación, dos empresas recurrieron al denominado Tribunal de Recursos Contractuales, que al final dio la razón al Ayuntamiento. El contrato al final se adjudicó en 874.170 euros. La segunda fase, de mayores dimensiones, "supone una inversión de dos millones", afirmó ayer Jesús Sánchez. Está previsto que los trabajos también comiencen en breve.

Además de la reducción de unos 300.000 euros anuales en el pago de energía, se prevé que la actuación "mejore notablemente la gestión que hacemos del alumbrado público". Así, todas los puntos de luz de la zona urbana estarán controladas informáticamente, a distancia. "Se controlarán a través del ordenador. Se sabrá en el momento si hay focos fundidos, avisos inmediatos en caso de avería... todo esto permitirá que los servicios operativos puedan actuar inmediatamente, y conociendo el origen del fallo en el momento", apuntó Jesús Sánchez. Este control "on line" también alcanzará a algunas zonas rurales.

Mantenimiento

Todas estos cambios en el sistema de iluminación pública hará que "su mantenimiento sea mucho más sencillo". Además, se pretende recuperar algunos puntos de luz que en los últimos años estuvieron apagados, así como "la propia calidad de la iluminación, que será mucho más uniforme".