La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Alzamiento de bienes: los administradores concursales imputan a la cúpula de Triman

Los gestores judiciales acusan a tres directivos de la firma de vender a una sociedad afín a mitad de precio material por valor de 1,3 millones

Giro inesperado en los trámites del concurso de acreedores de Triman Minerals. La administración concursal de la empresa, con dos plantas en Mieres que dejaron de funcionar hace un año (tras dos décadas de actividad), solicita al juzgado que condene e inhabilite a los tres administradores de la sociedad. Entre otras "irregularidades", los responsables del proceso concursal apuntan a un alzamiento de bienes. Se trata de una transacción firmada en 2016 a la empresa SAHER, socio único del cien por cien de las acciones de Triman y controlada por la misma persona física, y que ya habían denunciado portavoces de la plantilla. Sólo en sueldos, la compañía adeuda más de 300.000 euros a los trabajadores.

Los hechos a los que se refiere la documentación del concurso, a la que ha tenido acceso LA NUEVA ESPAÑA, ocurrieron el 5 de enero de 2016. Según consta en el escrito, "(Triman) realizó un contrato de cesión con la sociedad vinculada SAHER 2000 a través del cual Triman Minerals liquida una deuda vencida con SAHER por importe de 1.063.894 euros". Lo hace, añaden desde la administración concursal, "mediante la cesión y entrega de la titularidad de una relación de bienes muebles propiedad de Triman por su valor neto contable, que era de 1,2 millones de euros".

La administración concursal revisó el contrato "a fin de verificar la razonabilidad de los precios de dicha operación". Se encomendó esta labor a una sociedad "de reconocido prestigio en el mercado" y los resultados son sorprendentes: el precio en el mercado de los bienes alcanzaba los 1,3 millones de euros, SAHER pagó por ellos 640.457 euros. Entre otros, Triman traspasó a SAHER una máquina de corte de perfiles por 137.502 euros. El valor de mercado es de 188.247 euros. Aún más llamativa la diferencia de un bien identificado como "Laser Prima": SAHER pagó 157.429 euros por una herramienta valorada en 261.470 euros.

La resolución de la administración concursal es clara. "La salida de dichos activos se enajenaron al socio único de SAHER 2000, es decir, a una sociedad del grupo que estaba controlada por la misma persona física". Además, se realizó "por un importe muy por debajo a su valor de mercado, y en consecuencia, la sociedad privó a sus acreedores de poder disponer para el pago de sus deudas de la diferencia entre el valor por el que debieran haberse transmitidos dichos bienes y el valor realmente transmitido, diferencia que asciende a 674.874 euros". Es por eso que, a juicio de la administrador concursal, "el caso descrito encaja en el supuesto del artículo 164.2.4 de la Ley Concursal (alzamiento de bienes)".

La súplica al Juzgado de la administración concursal es que el procedimiento se declare "culpable". También a los tres administradores de derecho en los dos años anteriores a la declaración del procedimiento y a SAHER 2000 como cómplice. Además, también solicita la inhabilitación de las personas físicas por el plazo de dos años para la administración de bienes ajenos, así como para representar o administrar a cualquier persona física. La resolución de la administración concursal llega sólo dos semanas después de que el Juzgado dictara el fin de los contratos de los veinte trabajadores.

Compartir el artículo

stats