Más que amigos, hermanos. El concejo de Aller y el Valle d'Arán estarán hermanados por todo lo que comparten: la riqueza natural, las estaciones de esquí (Fuentes de Invierno y Baqueira Beret) y el desarrollo del turismo como motor económico. En la comarca aranesa llevan ya más de medio siglo con el sector como principal pilar, mientras que Aller quiere tomar buena nota para seguir sus pasos. El acuerdo incluye ya descuentos para turistas que viajen con el carné "Aller Adictos". Se ampliará con relaciones entre comerciantes y una promoción turística conjunta. "Es un avance decisivo para el sector", aseguró el alcalde del concejo, David Moreno.
El regidor formalizó ayer el acuerdo con la Conselhèra d'Arán, Anna Díaz. "Es un paso más tras el primer encuentro mantenido durante la Feria Internacional de Turismo, celebrada en Madrid el pasado mes de enero", explicó Moreno. En Fitur, acordaron que todos los portadores de la tarjeta "Aller Adictos" tendrían un diez por ciento de descuento en Baqueira Beret. Es decir, tanto en paquetes vacacionales como en alquiler de equipos y otros servicios ligados a la estación.
Fue un acuerdo con la empresa que gestiona el complejo invernal, pero faltaban por unir lazos institucionales. "El pasado 23 de enero mantuve un encuentro con Anna Díaz en el que se ratificó la intención de mantener una estrecha colaboración entre estas dos entidades públicas (la Conselhèria d'Arán y el Ayuntamiento de Aller), que ahora se materializará en un hermanamiento", señaló Moreno.
Los dos territorios tienen mucho en común. El Valle d'Arán está situado en el Pirineo central, provincia de Lleida. Cuenta con una extensión de 620 kilómetros cuadrados y con 9.930 habitantes. Un 30 por ciento de su territorio está por encima de los 2.000 metros de altitud. Tradicionalmente, la economía aranesa estuvo basada en la ganadería y la explotación forestal, pero en la actualidad el principal motor económico del valle es el turismo.
Iniciaron el desarrollo turístico, basado principalmente en la práctica de deportes de invierno, hace medio siglo. Transformaron su modelo económico, siendo actualmente una de las zonas con mayor renta per cápita del país. Y es el espejo al que quiere mirar Aller: "El peso del sector turístico ya ocupa un lugar importante", explicó el regidor". Un sector que cogió alas ya en 2007, con la apertura de Fuentes de Invierno, y que sigue avanzando con el programa de ayudas europeas Proder y Leader.
El hermanamiento será ya oficial cuando culminen los trámites administrativos. Y, más allá de los descuentos que ya se aplican, tendrá un efecto directo sobre el sector turístico. Entre otras acciones, "se pretende implicar a los profesionales del turismo para llevar a cabo intercambios de experiencias, en las que se puedan compartir conocimientos que redunden en beneficio de los dos territorios", explicó Moreno. Una de ellas ha sido la tarjeta "Aller Adictos", que ha llamado la atención de los responsables institucionales del Valle d'Arán "por ser una pieza clave en la fidelización de turistas". En Aller, quieren tomar nota de la "desestacionalización" del turismo en el valle. Los hosteleros están "encantados", listos para seguir aprendiendo.
