El hombre acusado de entrar a robar en dos casas de Mieres, llevándose incluso la grifería y las ventanas en una de ellas, admitió ayer los hechos y pactó una pena de cuatro años de cárcel, en lugar de los cinco que solicitaba la Fiscalía inicialmente.

El juicio tuvo lugar ayer en el juzgado de lo Penal número 2 de Oviedo. Los hechos, según el escrito del Ministerio Público, tuvieron lugar entre el 15 de junio y el 6 de julio de 2017 cuando el acusado accedió al interior de una casa unifamiliar en Los Pontones, Mieres, "propiedad de una de las víctimas y de su exmarido, que había constituido como vivienda habitual hacía pocos meses y a la que en aquel momento acudía de forma ocasional". El acceso a la vivienda, que se desconoce si el acusado hizo solo o en compañía de otras personas, se produjo "doblando la cerradura de una de las puertas de la casa". Una vez en el interior del inmueble, "se apoderó de numerosos efectos, entre ellos, joyas, once ventanas de aluminio que estaban en distintas estancias, ocho radiadores pequeños y uno grande, la grifería completa de un baño, los tiradores metálicos de las puertas de todas las estancias de la casa, los tiradores de los muebles de cocina y todas las tuberías de cobre y cable eléctrico que se encontraban a la vista". También "rompió una caldera de gasoil, apoderándose de las piezas de su interior". En días posteriores se detectó la venta de gran parte de las joyas sustraídas, realizadas por el acusado en varios establecimientos de compraventa. Los efectos sustraídos fueron tasados en 4.326,13 euros, de los que habría que descontar 630 euros, correspondientes al valor de los efectos que pudieron ser recuperados. En el caso de los desperfectos, estos fueron tasados en 1.882 euros.

Pero no fue la única casa en la que robaron. En la madrugada del 6 de julio de 2017, el acusado entró en otra vivienda de Los Pontones, contigua a la anteriormente citada. Al igual que en el otro caso, se desconoce si actuó solo o en compañía de más personas. Este domicilio, según Fiscalía, es la residencia habitual de otra víctima y su esposo. Para acceder a la vivienda, "violentó la puerta principal de acceso a la casa y, una vez en el interior, se apoderó de varios efectos que fueron tasados en 885 euros". Asimismo, causó un buen número de desperfectos materiales en la vivienda que fueron tasados en 4.360,82 euros", según el escrito del Ministerio Público.

La Fiscalía había solicitado inicialmente una pena de cinco años de cárcel para el acusado, considerando que los hechos eran constitutivos de un delito continuado de robo con fuerza en las cosas en casa habitada. No sólo eso, también pedía inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, pago de las costas procesales y abono de las correspondientes indemnizaciones a los perjudicados, más los intereses legales.

Sin embargo, el abogado de la defensa consiguió cerrar un acuerdo con la Fiscalía, reduciendo la petición de condena en un año. De este modo, el acusado reconoció los hechos y aceptó la condena de cuatro años de cárcel, con lo que el juicio no tuvo que celebrarse.